”Has de..” Qué alegría que te lo propongas como un deber.—Hizo lo mismo, correspondiendo a su gesto y sonriéndole de la misma manera, dejando entrever la sugerencia del trasfondo.— .. Aunque estás tardando..
Entrelazó sus manos con las de él, al mismo modo que se apoderaba del hombro sujetándole de forma ligera, parpadeó un par de veces y no pudo evitar ocultar su rostro de sorpresa. ─ Y eso no es lo único con lo que he de matarte. Que lo sepas. ─ Aclaró su garganta mientas sonrió.
Me matas de ternura.. —Irónico, le hizo perder el balance mientras se hacía cargo de su espalda y una de sus manos. Complaciendo su propio capricho al tenerle ahora a su merced.—