*La enorme criatura rezongó al escucharlo decir éso, debía haber gente malvada a la que pudiese quemar sin ganarse el reproche de Xiao-Daozhang. No era que cambiaba completamente al tener ése cuerpo pero algunas actitudes se veían afectadas, algunos dragones eran arrogantes y el ya era testarudo por naturaleza. Aún así solo Daozhang apagaba ésos berrinches con su gentileza*
Me temo que no.. pero también dudo que alguno vaya a querer enfrentarse a mi de nuevo, aún así me pregunto que será ver todo incendiarse tan deprisa, tuve esa duda hace unos momentos...
*Dejo quieto su rostro sintiéndo la pequeña mano sobre su rostro, no tenía razones pero si quería podia quemar un pueblo en cuestión de minutos*
*El experimentó ésa vez había funcionado como quería pero así mismo le dio a al asesinó una tamaño intimidante, aterrador pues si quería con un solo abrir y cerrar de fauses o una sola llamarada de fuego y cualquier persona dejaría de existir. Su poderosa fuente de fuego no era su unica arma, pero podía hablar y reconoció al pequeño taoista agachandose para verlo, susurrando para no reventar sus tímpano*