—Él nunca fue bueno para tratar con los demás, menos si se mostraban amenazantes para su ser, manteniéndose encogido de hombros. Tembló un poco, negando un par de veces, abriendo apenas los ojos para observarlo.—
esparvus comienza a transformarse. Tornándose escamoso y oscuro; con una tonalidad gris metálico, como si estas escamas estuviesen hechas de acero. A la par que una protuberancias crecen en la frente, hasta convertirse en, al parecer, dos armas letales que salen de su frente. Todo mientras su musculatura adquiere mayor volumen y solidez que en su forma "humana". Sus ojos, pierden el blanco de su globo ocular para volverse negro y su cabello crece, de mantenerse corto.**
Por ti, conservaré el rostro disfraz, pero sigue resistiéndote y verás al verdadero monstruo... te follará un monstruo...~ **Replica, con toda la mofa que siente en esos momentos. Una cola, con la punta terminando en una saeta filosa, se incrusta en la cola ajena para, con el dolor del ser plateado, hacerse soltar.**