—Una vez le vio recostarse, se acomodó de nuevo, cerrando los ojos para reposar, dejando su cabeza al raz del suelo.—

-se recuesta a su lado dejando la cabeza sobre el cuello del ciervo-

—Mirando el nido, agachó la cabeza un poco para olfatear antes de entrar y acomodarse, esperando por el contrario.—

-ya sabiendo se acostó a fuera del nido para dejar al más joven dentro, toco con su boca el nido invitándolo -

—Levantándose con cuidado, le siguió al ir caminando detrás suyo.—

-bostezo un poco dando media vuelta lleno a esconderse bajo unas rocas donde improviso su lecho -

—Terminó de acicalarlo, volviendo a mirarlo fijamente antes de tumbarse de nuevo, haciendo bastante contraste con los alrededores y con él principalmente.—

-dejo de estar alerta al ver que no es una amenaza para su territorio, se sentó observando al menor -

—Se quedó calmado por un momento, mirándolo fijamente hasta terminar entrelazados, comenzando a acicalarlo.—

-junta su nariz con la contraria si es un cervatillo lo cuidara como uno, deslizó su cabeza frotando sus rostros hasta entrelazar sus cuellos -