── Otra sentencia... Se equivocan la sentencia va

para ustedes, no se acerquen, no toquen a mi familia y llevaremos la fiesta en paz. Aquí se les han acabado el pan de piquito.

Mantenida segura aquella pequeña luz que fue calmándose incluso Viviana se disculpo por a ver tardado tardado en rescatarla; pero era mejor que hubiera sido ella y no alguien mas. Pues ¿como sabrían que buscar? dejo escapar un suspiro pesado para abrir una madriguera en el suelo tragándose parte de Apofis y volviendo a fracturarlo cuando se cerro.

Ambos tanto padre como hija se sorprendieron por las palabras de Viviana, sin esperarse que estallara de esa manera hiriendo el cuerpo de este. Pero era cuestión de segundos que volviera a regenerarse pues la oscuridad era así esperaba a que se apagara el sol para volver a rodear al mundo. Lamentaras esto Viviana si te la llevas te perseguiremos La voz de apofis taladro la mente no solo de la mujer si no su hija haciendo que se retorciera, debido a que fue por su descuido que ahora esa mujer tenia de regreso a su alimento favorito. AGRRR Viviana has cavado tu sentencia.

Y vaya que tenia mucho que dar para ese momento pues su objetivo estaba claro, escuchaba el corazón latir de su pequeña dentro de aquel monstruo que solo sabia devorar confinado a la inmensidad de la oscuridad.

── Quieres todo de mi hahahaha ¿Mas? han tomado muchas

cosas de mi y siguen queriendo hacerlo pero cuando saco las garras allí yo, yo soy una maldita porque arrancara todo lo que este en mi camino de raíz así tenga que llevarme medio mundo conmigo lo haré ¡AHORA DAME A MI HIJA!

Era una fiera en ese momento, no importaba que las paredes quisieran apartarla como dijo mataría su mundo si con ello conseguía su objetivo; ya ha perdido y prometió cuidar a los suyos a costa de su vida pues esta harta ¡Harta de que la quieran joder! De pronto el calor aumento detonando en el cuerpo de Viviana de usar su estallido nuclear para abrir aquel ser en dos bañándose de sus fluidos aprovechando de ir hasta aquel recipiente.

Siempre he admirado tu ímpetu, veamos niña ¡Dame lo que tengas! Contrayendo su cuerpo se preparaba para digerir aquella mujer, desaparecerla de la fas de la tierra si era necesario con tal que nunca recuperara a esa niña, era un alimento infinito, al igual que su madre; parecían que nunca se gastaba aquella luz. Conejito conejito enserio quieres ser devorada. Un cóncavo recipiente con luz tenue al escuchar aquella voz comenzó a tintinear una, dos, tres hasta que fue volviéndose intermitente alertando que estaba allí.

── Hemos roto el lazo que nos unía Apofis de nada te

sirve ella, crees soy ingenua no yo solo me hago la desentendida pero de mis hijos NUNCA!

Recrimino sus palabras estando sujeta a los tentáculos de aquel ser, diversas batallas pasaron, perdió y gano. Ahora había el momento de recuperar una parte de ella que fue robada, arrebatada de su seno para entrar a una asquerosidad aunque estaba clara de algo esa niña era si primogénita. Rechinando sus cadenas cortaron sus piel haciendo que sangrara, sabe el gusto de aquel animal por su sangre y se la daría con una sorpresa.

Las entrañas de Apofis gruñían ante la presencia de un intruso; hambriento de poder aquel gusano milenario distinguió ¿quien se encontraba dentro de el? pero el sabor... Ese gloriosos sabor a esperanza una ves lo probo jamas pudo olvidarlo. Viviana. Hablo con estruendo haciendo temblar su interior. Se lo que buscas pero no esta aquí. Adquirió un tono de burla rodeando a la ingenua mujer que llego hasta él, su hija Dalia que se encontraba mirando todo reía pues la pequeña si estaba con vida pero ¿ahora la buscaba? ¿que estaba pasando por la mente? bueno Laxis lo predijo tarde o temprano los buscaría.