31-35, M
El mismo martillo que rompe el cristal, forma al metal.
About Me About Me NotesAbout Me
Un poco de historia.
El mundo espiritual: hogar de los seres mágicos sin forma, algunos tan sólo son masas de energía flotando, otros poderes ocultos más allá del entendimiento de muchos. Sólo existían cuatro seres con silueta humanoide: El elemental del fuego, agua, tierra y viento.
Nutridos con el poder que lleva su nombre, aquellos cuatro seres vivían preocupados por los otros, que desdibujados en su existencia envidiaban a los elementales por su forma. Fue entonces, que el primer humano pisó el mundo espiritual, y todo cambió.
Descubrieron que las visitas humanas en el mundo dejaban huella en él. Los espíritus comenzaron a tener forma, se relacionaban entre ellos, y muchos desarrollaron habilidades y trabajos. El místico lugar era alcanzado por los humanos a través de sus sueños, y algunos con más habilidad mágica, encontraban lugares sagrados en el mundo humano y visitaban el lugar. Por un tiempo, ambas razas convivieron en armonía.
Conforme el mundo humano se desarrollaba, los seres espirituales dejaron de ser novedad. Las prioridades humanas cambiaban, los sueños se volvieron más huecos, la magia se producía con máquinas y productos novedosos. Las visitas bajaban, todo retrocediendo en el tiempo.
El mundo espiritual: hogar de los seres mágicos sin forma, algunos tan sólo son masas de energía flotando, otros poderes ocultos más allá del entendimiento de muchos. Sólo existían cuatro seres con silueta humanoide: El elemental del fuego, agua, tierra y viento.
Nutridos con el poder que lleva su nombre, aquellos cuatro seres vivían preocupados por los otros, que desdibujados en su existencia envidiaban a los elementales por su forma. Fue entonces, que el primer humano pisó el mundo espiritual, y todo cambió.
Descubrieron que las visitas humanas en el mundo dejaban huella en él. Los espíritus comenzaron a tener forma, se relacionaban entre ellos, y muchos desarrollaron habilidades y trabajos. El místico lugar era alcanzado por los humanos a través de sus sueños, y algunos con más habilidad mágica, encontraban lugares sagrados en el mundo humano y visitaban el lugar. Por un tiempo, ambas razas convivieron en armonía.
Conforme el mundo humano se desarrollaba, los seres espirituales dejaron de ser novedad. Las prioridades humanas cambiaban, los sueños se volvieron más huecos, la magia se producía con máquinas y productos novedosos. Las visitas bajaban, todo retrocediendo en el tiempo.
Para Venser, los augurios fueron bañados en confrontaciones de lo que la moral intentó cortar cabeza, escribiéndose su destino a punta de placas de acero y bronce, y por qué no en otros metales también. Contándose leyendas urbanas y otras no tan creíbles para los lectores y oyentes que transmitían las hazañas de generación en generación. Los motivos de tales luchas siempre fueron para conservar la paz entre el limbo elemental y el humano, sobre todo para el primero.
Cuando su fama fue manchada por los arrebatos fatídicos de su pasado, de fases testarudas y duras como lo es su elemento, prefirió el anonimato, y viendo que muchos preferían usar su propiedad para quitar las vidas de los desprotegidos, retornó a las andadas de ser el león que mantenga a raya a las hienas, bajo el anonimato de un servicial camarero, siendo su verdadero rol, de un guardaespaldas.
Cuando su fama fue manchada por los arrebatos fatídicos de su pasado, de fases testarudas y duras como lo es su elemento, prefirió el anonimato, y viendo que muchos preferían usar su propiedad para quitar las vidas de los desprotegidos, retornó a las andadas de ser el león que mantenga a raya a las hienas, bajo el anonimato de un servicial camarero, siendo su verdadero rol, de un guardaespaldas.