—Siempre se puede volar.— dijo con la mayor confianza posible.
Al paso del tiempo podía ver como el cuero se iba desgastando, no dijo ni diría nada, bajo sus intereses, aquello podría ser beneficioso en algún momento, como por ejemplo, qué no la mate al escapar.
—Ya te ves más acostumbrado a la prisión, Red. Otro poco y te pondremos una casita y tu propio plato de alimento. [?]
—Ahh... Ustedes las aves siempre soñando, no podrán pasar, éso lo sé.
-Se quedó con la canasta igualmente y pudo comer bien un par de días, aunque seguía mordiendo el cuero de a ratos ahora estaba más tranquilo, no tratar directamente con el rey Ezhno sino con una mujer hacía que no fuese extremadamente violento-
—Mmm... Al menos ya me dijiste que se abre solo por dentro.
Por fortuna o desgracia, ese era el primer interrogatorio de la chica. Le dejo la canasta por completo, pero igual le dio un pequeño palmeo en la cabeza al ver como roia el cuero.
—Deja eso. Compórtate. Puedes comerte todo en paz, por hoy no haré más preguntas.
—Creó que necesitarás más que una canasta para convencerme de traicionar a mi reino...~
-Gruñó con fuerza tratando de roer el cuero en los grilletes, estaba más que seguro que hacer en medio de un interrogatorio, querían que dijese algo de su rey y sus defensas pero no hablaría-
—¿Y si consiguiéramos abrirlo, qué sería lo primero a enfrentar?
Su mirada sobre el can ya era más que curiosa, esa información si le era útil pero quería más. Sostuvo del aza la canasta para no soltarla en caso de que se la quisiera quitar por completo, así la acercó al pelirrojo poco a poco.
-El can agarró el bistec común y lo comió un poco más tranquilo, estaba bien pero lo que había dentro de ésa cesta olía mucho mejor, rápido tendió las manos tratando de tomarla pero estaba un poco imposibilitado para moverse mucho-
—Khalessa solo tiene una forma de entrar y salir, ése puente no es fácil de pasar y en tus sueños creé que van a hacerlo porque solo se abre desde adentro.
—Complicaciones de la monarquía...— Acercó la canasta qué traía consigo, en ella había guardado una comida más "decente" para el can. Primero solo le acercó un bistec simple. —La canasta viene llena de comida. Te la daré toda si me dices algo sobre tu reino... Y no detalles sobre su cultura o cosas así, quiero algo para que el rey Ezhno pueda usarlo en la guerra.
