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41-45, F
~ Historia ~
About Me
About Me
[center][c=#60BFBF][big]Sirith[/big][/c]
[c=#8C8C8C][med]Ice Dragon[/med][/c][/center]
[c=#60BFBF]x[/c] [b]Edad:[/b] Desconocida.
[c=#60BFBF]x[/c] [b]Color de ojos:[/b] Plata.
[c=#60BFBF]x[/c] [b]Color de Escamas:[/b] Blanco. Útil camuflaje en su ambiente acostumbrado.
[c=#60BFBF]x[/c] [b]Elemento:[/b] [c=#608080]H I E L O[/c]

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[med][i][c=#60BFBF]Erklärungsnot[/c][/i][/med]
[c=#60BFBF][i]"La ansiedad que produce el tener una pregunta y estar consciente de que es imposible obtener la respuesta..."[/i][/c]

Y bajo este concepto se rige su mundo. La ausencia del saber, la lucha contra la ignorancia. Tras cientos de años merodeando en las heladas montañas que conformaban su guarida, las preguntas la carcomían diariamente, hostigando su cordura y su razón. El dragón tan sólo daba vueltas, y vueltas por su territorio. Las preguntas se repetían una y otra vez, y las respuestas seguían ausentes. Esta obsesión consumía tanto su concentración que sus habilidades sociales jamás se desarrollaron, y fue conocida como uno de los dragones más solitarios.

Fue la apertura al mundo humano lo que la despertó. Al paso de los años compartía con ellos la necesidad del saber, de crear métodos para estudiar respuestas. A pesar de los objetivos de su líder, al principio le tomó cariño a estos seres, e incluso trabajó con ellos con el fin de avanzar hacia las respuestas. Cada día el despertar era una pregunta resuelta, y eso la motivó a continuar apoyando a los humanos en secreto. Ellos habían creado pastillas calmantes, que eran todo un alivio para su ansiedad y sus agraviados nervios.

La humanidad progresó, alcanzó un pico sublime de conocimientos y después, con las nuevas generaciones cayó en picada. El desdén por el mundo a cambio de comodidades egoístas convirtió el planeta en un desastre. Objetos sin importancia ahora eran un motivo suficiente para apuñalar a alguien en la calle. Comprendió pronto los objetivos de su bando, y entró en acción.

No tocó con sus manos a absolutamente nadie, pero si destinó ingresos que había generado a organizaciones de motivos inútiles para generar exterminios. Los humanos eran tan estúpidos que entre ellos podían destruirse a si mismos. Designó a sus propios representantes para que se enfocaran en este dinero, y volvió a sus tierras, decepcionada por lo que había encontrado.

No obstante, el mundo parecía volver a avanzar de nuevo. Los conocimientos volvían a ser significativos, el regresar cada vez más viable.

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