User1548943 is using SimilarWorlds.
Join SimilarWorlds today »
26-30, M
Sᴇʀɪᴏ, ᴄᴀʟᴍᴀᴅᴏ ʏ ᴀʟᴏᴄᴀᴅᴏ
About Me Notes
The Whiteboard is a place where people can send Gestures, Attributes, Images, Comments, and much more...
This page is a permanent link to the comment below. See all comments »
A1544670 · F
[code]
El verano estaba concluyendo despidiéndose con cada día que transcurría para dar paso a la llegada del Otoño, aquella estación favorita de Orihime pues adoraba ver las copas de los árboles corleándose de preciosos tonos marrones/rojizos, el crujir de las hojas secas bajo sus pies entonando un suave crujido, las enormes calabazas anaranjadas que brotaban con aquella época, las festividades y festivales tan dinámicos que celebraban en la academia, los sutiles rayos de sol que a pesar de carecer de calor eran lo suficientemente cálidos para no morir congelados, el poder llegar a casa y dormir debajo del futon térmico, el brillo de veladoras y fragancia de las flores, todo era precioso y maravilloso en Otoño.


Ya había transcurrido un año desde que aquella peli naranja había ingresado a la preparatoria de Karakura y no podía sentirse más orgullosa de sí misma, realmente deseaba con todas sus fuerzas poder completar sueños que su amado hermano Sora no había podido cumplir, su hermano había sacrificado tanto por ella que lo mínimo que podía hacer era esforzarse con cada día que pasaba al máximo sonriendo con todas sus fuerzas y luchando por alcanzar sus sueños y metas en nombre de ambos, Sora siempre se había esforzado el doble para que Orihime conservara aquella dulce sonrisa y sin importar su agotamiento o la carencia de objetos para sí mismo siempre se mostraba cálido y brillante para su pequeña hermana siendo así su soporte y héroe personal.

Aquella mañana de Septiembre Orihime se levantó de forma rutinaria, primero ingreso al interior de la ducha relajando su cuerpo en el agua caliente aseándose perfectamente bien para posteriormente lavar sus dientes, vestirse con el uniforme escolar, maquillar de forma natral su rostro y posteriormente peinar aquellas largas hebras adornándolas con unos prendedores que eran su firma personal, aquellos objetos más valiosos para ella pues habían sido el último regalo que su hermano mayor le había obsequiado antes de fallecer, aquellas flores azules resaltaban de forma encantadora he infantil entre sus cabellos naranjas, coloco un suéter marrón sobre su pequeño cuerpo y una bufanda roja alrededor de su cuello, tomo su maleta y su almuerzo el cual se encontraba cubierto por un curioso pañuelo azul reí con decoraciones de peces dorados.


Hermano, ya me voy al colegio ¡Hoy también me esforzare al máximo! ¿Sabes? Ya hemos iniciado los preparativos para el festival escolar de Octubre, ese día habrán muchos invitados en nuestro instituto, estoy muy emocionada, habrá muchas personas de secundaria visitándonos para poder considerar la preparatoria de Karakura como una de sus opciones. Regreso por la noche Onii – san por favor no te preocupes prometo llegar para la cena.

La mirada de Orihime expresaba mucha ternura y cariño, desde aquel acontecimiento en el que Ichigo se había enfrentado a su amado hermano ya fallecido como Hollow, la peli naranja había comenzado nuevamente a prender veladoras en su nombre y a contarle día a día todo lo que hacía o le pasaba para que de esa forma Sora nunca más se sintiera solo, otorgando una última mirada a la fotografía del altar en forma de despedida. Salió de casa, aquella mañana había despertado más temprano de lo habitual así que se tomó su tiempo para caminar de forma pausada a través de las calles de la ciudad respirando profundamente el aroma del viento matinal, disfrutando de los tenues rayos de sol que iluminaban los arboles casi dándoles brillo propio, no podía estar más entusiasmada con las actividades que tocarían a su aula, una casa embrujada y un puesto de Takoyaki, a pesar de aun no ser Octubre ya toda la academia estaba colaborando y armando los puesterillos y adornando los salones para el festival cultural de Octubre, a otras clases les había tocado armar juegos o diversos tipos de dulces, cafeterías maid, salones de té, todo tan pacífico y normal como yacía mucho tiempo no se podía disfrutar de tanta paz y tranquilidad en aquella mística ciudad.

Sus largos cabellos se meneaban en compás del gentil soplido del viento danzando de un lado a otro mientras recorría aquel sendero de piedras que la guiaría hasta la entrada del instituto, aquel camino que la llevaba hasta la escuela era uno de los lugares favoritos de Orihime pues a los costados de este se encontraban grandes cantidades de árboles, cerezos que resaltaban en primavera y un camino de hojas secas y arboles marrones en Octubre y Noviembre.
[/code]
[image removed]