Si, recuerdo que a Victor le pagaron para exterminarme. -Cortante pero con cortesía, la shinigami simplemente dio un paso al costado izquierdo, dejando pasar el golpe de largo, ese puño que agitó un par de sus hebras, y no mas que eso.- Bueno, en ese caso... espero que hayas venido con todo aquí, porque ahora que lo dices pienso matarte también.