-sonrie sin dejar de sujetar su mano mientras su otra mano la meta en el bolsillo de su pantalón como todo un chico- Recuerda lo que me has dicho. ¿Vale? El lugar de tu sonrisa es en tu rostro así que quiero verla todos los días. -le suelta la mano y la abraza por la cintura aprovechando cuando la rubia le da el beso en la mejilla- Me alegro que pudi estar contigo en los momentos dificultades. Yo también te quiero Usagi, siempre me tendrás cerca.