El brazo se clava en la tierra y la armadura se desplaza hacia adelante aprovechando el impulso. La trayectoria abierta que había tomado Tsuru resulta inconveniente para acortar la distancia y dado que Scathach se había plantado en el suelo para observar la arremetida del enemigo podría resultar en severos daños.

El samurai apresura la marcha pero no llegará a tiempo para bloquear la tacleada de su enemigo, más aún así arremete el paso para actuar de acuerdo al golpe.

La espada llena de ojos es alzada por encima de su cabeza y parece que es un ataque frontal y directo hacia la mujer en leotardo. Los ojos brillan conforme se van acercando y ya no parecen erráticos, sino que observan fijamente a Scathach