-Bastante...-

-Sino te importa me ire a caminar-

Se incorporo de donde estaba. -Nos vemos.-

Bueno, sobre eso ella no podía opinar al respecto por experiencia nula. incluso se preguntaba a qué se estaba refiriendo exactamente.

- ¿Lo son?- Había cierta curiosidad en lo que acababa de mencionar. - ¿Qué de complejo puede ser compartir un momento intimo?-

Ricardo hacía cada comentario que le hacía ruido a ese ser incomprendido.

Hasta para tener sexo tambien son complicadas

-Aun con los brazos cruzados sin quitar aquella sonrisa-

Si, tienes razón...pero no tanto como ustedes

- No nos culpes, es el don y la maldición de ser multitask.-

Se cruzo de brazos al verlo tan despreocupado, aveces envidiaba un poco eso de él.

-Mientras su cerebro funciona como cajones donde separan cada aspecto de la vida el de nosotras este hecho un lió de cables entrecruzados. Aun que en realidad cuando se trata de sentimientos ni ustedes se salvan de ser complejos igual.-

-Eso noto no necesitas decirlo-

Se recostó de la columna con los brazos cruzados sin quitar aquella sonrisa sarcástica

- Ustedes se complican demasiado la existencia realmente-

- Hey, subestimarme te llevara a un día darte una tremenda desconocida.- Su tono revelaba cierto orgullo ante sus sarcásticos comentarios, le haría tomarla aun que le costara.

- Por otro lado, debo darte la razón- suspiro resignada, solo de ser consciente de el fuerte contraposición interna en la relación Treia-Astrea- Somos complejas; ustedes demasiado prácticos.... tanto que parece grosería.-

Sonrió al pensar en como se dejaban ir por impulsos y satisfacción inmediata sin rodeos en todo aspecto.

-Así que me haz estado estudiando muy bien para ser una simple mocosa ¡Perdón! mujer- Dijo con sarcasmo con una leve sonrisa-

-A veces ustedes hacen cosas que ni yo mismo entiendo la verdad supongo los años están causando estragos en mi-

No lo decía que porque físicamente se viera viejo sino estar sumergido haciendo de las suyas se olvido de muchas cosas.

Alzo la ceja y le miro con cierto recelo al escuchar ese comentario. Si algo tenía Astrea era que odiaba ser comparada con el resto de las mujeres, había tocado una fibra de su ego, pues ella se consideraba punto y aparte.

- Humm... ¿Cómo así? Tras tantos años de experiencia seguro que si entiendes el truco pero te gusta jugar al desentendido.-

Su pulgar detenía con fuerza su dedo corazón hasta que estuvo su mano a la altura del pecho ajeno para soltar un golpecito con este.

-Dejo escapar una carcajada divertida- Mujeres quien las entiende - Dijo en tono sarcástico- Ustedes y sus cambios raros.

- Adulador...- desvía la mirada algo cohibida por el halago, debía admitir que para ser un titan tan colérico lucía demasiado encantador.