𝐋𝐚 𝐜𝐢𝐮𝐝𝐚𝐝 𝐬𝐮𝐛𝐭𝐞𝐫𝐫𝐚́𝐧𝐞𝐚. ─La ciudad subterránea así llamaba a aquel laboratorio con sin fines de pasadizos, recovecos y quien sabe que mas ocultaría. Era una cuidad con miles de fantasmas que se paseaban mientras recordaban a sus tiempos de glorias ¡Si como no! ¿que llamaban gloria? usar ADN de animales para crear prototype con fines que terminaron siendo egoístas pues no midieron las consecuencias, debido a que para ellos los fines justificaban los medios... Ahora en decadencia solo daba la impresión de estar en ruinas, ruinas que pronto volverían a escuchar voces.─
¿Sillas? ¿que harían unas sillas en un lugar como este? Indago el joven Kuroha, sujetando la mano de Kimi. Si, mira son sillas ¡Vamos!
Eran muy consientes de su entorno, cada pisada que daban era calculado siendo incapaces de lastimar a algunos de los insectos aunque claro si veían uno muy cerca lo echaban a un lado al moverlo con su pies, por ello seguramente era que se quejaban. Mientras mas se acercaban al lugar, comenzaron a tener la brillante idea o no tanto de escalar usando sus colas pero se resignaron justo a tiempo por el ruido que provenía de una de las instalaciones alertando sus sentidos.
Son niños después de todo, no los puede dejar de ver ni 5minutos que se les pierden, espero a que regresaran por si mismo pero los minutos fueron segundo y luego horas, haciendo que se levantara para ir a buscarlos... Aquel laboratorio en si no era un lugar para andar curioseando nunca se sabia cuando algo les pudiera caer en la cabeza por tocar lo que no debían.
A ver ¿donde se habrán metido los copos?
Mientas caminaba escuchaba su entorno, los sonidos de los insectos que le indicaban donde estaban metidos el par de niños; la gargantilla que Kin le había dado permitía que fue mucho mas sencillo entenderles resultando en pequeñas risas por el hecho de que sus quejas se trataban de que tenían que esquivarlos para que no los pisaran siendo que al pasar Cinnia se quejaban haciendo pataletas tal cual como Kin.
Los niños siempre se encontraban cerca de su hermana mayor, cuando ella desidia ir al laboratorio del padre de cotton; ellos la acompañaban para que no estuviera sola. Siendo así que se adentraban en aquellos extensos pasillos llegando incluso a perderse pidiendo ayuda a los insectos para que les avisara a su hermana, cuando no solo arrastraban sin pena a su hermana para que fuera con ellos.
No sabían que hora hora, aquel lugar era como si se tragara por completo el día llegando a provocar un ambiente sombrío pero dado a que aun no se acostumbraban al sol le venia como anillo al dedo.
Deberíamos regresas ya a la alcoba de Ne-san Llamo la atención Kuroha a su hermana Kimi. Si deberíamos pero mira eso parecen ser sillas.
