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No solo me gusta si tuviera que decir una palabra para calificar como me hace sentir… No existe, me quedo corta.

Agradeció que ya parara con eso de “no tendría celos ¿si?” primero y principal porque no necesita mirar a los lados cuando tiene a alguien tan maravilloso a su lado, es sencillo pues no quiere, no desea que este llegue a dudar de lo que ella siente; eso es tan feo y agobiante que desencadena muchas consecuencias es una clase de agua que no desea beber mucho menos darla a probar.

Ya verás un día entenderás. Jugo con el anillo de compromiso en su dedo dejando una pequeña sonrisa en evidencia hasta tomar a un minino entre sus brazos. Tan suave como una moto de algodón.
Levanto las manos en son de paz no la molestaría mas ya había conseguido lo que quería ver, soltando una carcajada un poco sínica de su parte. — Ya está bien, pausa al asunto veo que quieres a tu pareja. — Era bastante fastidioso cuando quería serlo o vivaz más sabía cuando era momento de detenerse o conociéndola le soltaría un golpe en su cara.
Tenía casi la mano en toda la cara ajena aunque se viera grosero pero fue lo primero que hizo cuando se acercó tanto a su rostro ¿Qué le pasaba por la mente a ese hombre? Era extraño; recorrió pare de su columna el escalofrió mas incomodo de toda su vida por aquel beso sobre su mano. Si, asi es, no está acostumbrada a ello.

Mutante tú… Me llamo Tinick Cinnia mis padres pensaron mi nombre para que vengas a decirme de esa manera tan tonta.

Sacudió su mano para que la soltara volviendo a tomar distancia, al parecer no solo a ella le dio cierto grado de incomodidad, los mínimos también parecían regañarlo.
Puede que sea solo un rasguño como dices pero toca cambia si se infecta.— Sonó un poco serio aunque tenía fundamentos para pensar en ello, termino de curar su mano y claro no se alejaba tanto dado a que quería ver como reaccionaba. —Entonces te celaría bueno hasta yo lo haría después de todo la chica mutante es bastante única.— Los gatos maullaban como si le reprochaban el comportamiento hacia aquella joven, incluso bufaron ¿después dicen que no son inteligentes? Pero en fin no le presto mucha atención.
Si lo quieres ver así, es tu punto de vista. Solo se debía a que era amable o se mostraba tranquilo con ella. ¿Mi mano? ¿Para qué? No es nada solo un rasguño.

Fue como si hiciera caso omiso a sus palabras ya tenía entre sus manos la propia, reacciono haciendo el típico gesto arrugando su nariz cuando algo no le parecía; pero podía entender que se preocupara o le diera importancia a algo tan pequeño, le observo atenta moviendo los dedos de su mano como si con ello mostrara estaba perfecta.

La curiosidad mato al gato… Pero la afortunada soy yo de tenerlo a él en mi vida. Su expresión cambio a una mucho más suave dando un pequeño destello en sus ojos. ¿Celarme? No sabría que decirte, supongo… Opino que ¿hmm? Si.
Su mano estaba acariciando por detrás de las orejas del gato que tenía en su regazo, podía ver que la joven había sido educada con temple a la misma ves que el amor no le había faltado nunca, era segura de sí misma haciéndola ante sus ojos atractiva. —Debo sentirme honrado entonces por poder tener una charla contigo y optar por tu compañía. —Fue testigo del arañazo del gato gusto cuando escucho que si tenía pareja preguntándose ¿Cómo sería aquel joven? Ya que cree que no es una chica fácil de saber llevar. — A ver déjame ver tu mano. — Le tomo y la reviso sacando un pañuelo de su bolsillo para limpiar un poco de la sangre que brotaba. — Es un chico afortunado entonces ¿Cómo es? Me da curiosidad saber y sobre todo no te celaría por ver la cercanía que tenemos en este momento. — Rio un poco quedando muy cerca de ella hasta darle un beso en la mano.
Pues ella tiene el control sobre si misma debido a ello tiende a mandar a la mierda a aquellos que quieran pasar sobre ella, utilizarla para sus fines o abusar; teniendo siempre en cuenta cuanto es lo que vale.

Así es, soy tan mía que puedo darme el lujo de elegir con ojo clínico: quien vale la pena y quien no para compartir conmigo.


No mal pongas sus palabras aun y cuando suene sus palabras engreídas, Cinnia tiene un carácter bastante fuerte con unas bases y cimientos duros para soportar las tormentas solo su familia conoce el lado infantil que esconde dentro de sí misma, detuvo el jugueteo cuando lo escucho cerrando uno de sus parpado al sentir el incómodo arañazo sobre su mano, si la aquel minino atrapo la ramita y su mano como consecuencia.

Hmm ¿auh? Hizo un intento de queja. Si la tengo, tengo pareja.
Eso quiere decir que a ti no te controla nadie.— Los gatos estaban hipnotizados con el movimiento continuo de la ramita que tenía Eva, despertando su instinto de caza. Lo mimos parecía haber sucedido con Sanzu pues no podía quitar de su rango de visión a la joven hasta que hizo mención de su cigarrillo, tenía razón los animales no tenían que soportar su habito de fumar pero si lo pensaba bien ¿Qué mierda no tenían ya en sus sistema? Después de todo el mundo esta y seguirá estando contaminado. — Evitare fumar solo por hoy pero dime algo Eva tengo curiosidad por saber ¿tienes pareja? —Era un pregunta inofensiva pues solo queria saber mas de ella.
Las ovejas (humanos) se asustan con cualquier cosa que no comprendan o no sepan dominar.

Contesto con naturalidad moviendo aquel pequeño pedazo de pasto con el que buscaba llamar la atención de los gatitos, escuchando como se sentaba y el maullido de unos de los mininos cuando fue tomado del suelo.

Evita fumar a los animales le hacen daño solo por eso.


Ya que si fuera por ella le hubiera pedido uno en ese momento si no fuera porque respetaba a los animales incluso más que a sus ovejas; Cinnia solo quería parar el rato pues sus nuevas responsabilidades aunque no le exigen tanto son bastante activos a esa hora de la tarde moviéndose por su espalda, eran dos pequeños Proto-Escorpiones que no se separaban de ella y si los tiene con ella ahora.
Tomo la iniciativa de sentarse a un lado de donde se encontraba ella, agarrando a uno de los michis , recordando al que cuidaba uno de sus compañeros dejándolo sobre sus piernas, pidiendo así tener sus manos libres y sacar un cigarrillo. — Recuerdo que te vi jugar con algunos asustaste a las personas a tu alrededor. — Fue una imagen divertida de ver como morbosa en algún aspecto.

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