No sé si no los necesitamos en realidad, lo que sí sé es que algunos, propios y ajenos, me han sido útiles en más de una ocasión.
-se encoge de hombros y hace un gesto torciendo ligeramente la boca y levantando la ceja por unos segundos. luego da una última calada a su pipa, antes de que esta se apague por completo. Mantiene el humo en su interior, por unos segundos, y luego lo deja escapar en un hilo constante-
Aquella risa no perduraría, pues la personalidad de aquel joven no se prestaba mucho a ello. Por otra parte, le parecía curioso cómo es que muchos rasgos humanos se hacían presentes en la contraria, algo que causaba intriga en él.
— Los superiores al mando sólo dan órdenes; frías y sin consideración por algo tan banal como los sentimientos. Algo que no necesitamos.
-Le hizo un gesto de reproche que terminó pareciendo un mohín gracioso. Era obvio que debía conocer el concepto y sin embargo creyó buena idea explicarlo, ¿por qué? quien sabe, no es como que se viera como alguien que viva debajo de una piedra.-
Mi error. -murmura tratando de ocultar su ápice de vergüenza- Y eso es ¿Por?
Soltó una pequeña risa, le parecía gracioso el hecho de que le hubiera puesto a pensar una manera de explicar aquel concepto. No habia necesidad de ello, pues lo conocía, aunque no lo había llegado a necesitar.
— Comprendo el concepto. Aunque no he llegado a aplicarlo.
