– ¡No digas más cosas de esas Hiyori! – Se cubrió el rostro con sus manos sin saber dónde más ocultarlo de la vergüenza por la que estaba pasando.– Seth no es de esos hombre.

— Extendió sus alas emprendiendo el vuelo alrededor de su amiga, volaba en círculos riendo divertida. —

Mucha piel, mucha piel para Seth! O te cubre o te rapta! Fiu, fiu ~

— Canturea divertida mientras le da unos chiflidos. —

– ¡Hiyori! – Elevó un poco su tono de voz con sus mejillas sonrojadas por las palabras de su amiga Dragona. – ¡¿Pero qué disparates dices?!

Que bueno que te gusto la foto ahora puedes hacer travesuras con seth -huye-