Je je je

-ella gano este duelo-

-Cuando terminó la pregunta ya estaba metido entre los pechos de la demonio-

Shhhhh!!!

¿y como lo harás?

Jajaja tu boca está llena de razones, voy a tener que hacerte guardar silencio.
-Le guiña un ojo y sonríe con la boca torcida, quien sabe que perversidad se le ocurrió a la rubia-

pero se supone que la demonio aqui eres tu
-ríe de manera perversa-
yo..soy solo un simple mortal

Eres un demonio pero me encanta.

-Entonces se detiene y lo observa-

jeje...

Cariño, si me detengo no va a ser en vano.

-muy terco continúa, como queriendo dibujar aquel vientre-