Por lo menos yo me acepto como soy, no como otros con complejo de semental. -Vio como todo se cayó y dando un suspiro empezó a limpiar todo.- Caprichoso...
Y yo te veo cara de espada oxidada. ¿No queres que te eche un poco de Coca Cola para ver si resolvemos ese tema? -Sostuvo la mesa para que las cosas no se cayeran, no pensaba limpiar el desorden del loquito.- ¡Pará, animal! La mesa no tiene la culpa de tus ataques de concha. Relajá las nalgas.
-Azota la mesa con bastante fuerza con el puño cerrado tras escuchar la palabra "otro planeta".- ¡¡Soy de Folka, Shokudaikiri!! ¿¡Me ves cara de Terón?!
-Se separa no por su orden, sino porque está totalmente ofendido de que este no correspondiera a su beso.- Qué delicada que te volviste, Shokudaikiri. No sos el mismo hombre del que me enamoré hace unos meses. Qué decepción.