« Back to Album · Next »
Newest First | Oldest First
Soujiro · 26-30, M
Sabe jugar sus cartas, al menos eso puede reconocer en la manera como ella mezclando entre palabras y acciones muestra ese comportamiento cuanto menos... particular; si bien no es ajeno a los seres que por mera diversion son capaces de cualquier clase de locuras, este encuentro en si mismo se ha vuelto de los mas llamativos que ha tenido; no hay hostilidad, mucho menos intenciones de mutuamente atacarse, por mas que reconozca que en sus palabras se encuentra el acido veneno de una serpiente buscando una presa, el que algunos llaman "joven dragon" no se muestra ni aterrado, ni renuente de dejarla proseguir, quiere saber hasta donde ella puede llegar.
— Y supongo que fui el seleccionado para ello.
Una sonrisa confiada se formo sobre sus labios, incluso en la manera como se dejaba tocar, no la rechazaba, mucho menos se mostraba renuente a dejar que le recorriese, incluso que rompiera distancia si esto pudiese facilitar aquel encuentro.
— Supongo que el caos llama al caos.
— Y supongo que fui el seleccionado para ello.
Una sonrisa confiada se formo sobre sus labios, incluso en la manera como se dejaba tocar, no la rechazaba, mucho menos se mostraba renuente a dejar que le recorriese, incluso que rompiera distancia si esto pudiese facilitar aquel encuentro.
— Supongo que el caos llama al caos.
ahridahaka · F
— ¿Quién lo es realmente?
𝗨n juego en su pregunta ante la observación pero el interés no radica ahí, solo ensancho la sonrisa cuando su cola fue retirándose del arma lentamente. Un análisis apoyado en milenios de existencia cuando intuye que el hombre es un tipo de cazador, su postre favorito, solo en su mirar se podía notar el descaro divino con el que observaba al hombre para captar su esencia.
— Soujiro, querido...llevo encarcelada en Damāvand muchos milenios, una aburrida y solitaria montaña sin visitas. 𝖍𝖆𝖍𝖆𝖍𝖆...
𝗦i quiso dar pena en algún momento, no pudo conseguirlo y menos cuando la cola que se agitaba traviesa fue directa al rostro ajeno para tomarlo y reclamar toda su atención para que la mirara a los ojos.
— Comprenderás que estoy aburrida, en antaño fui la Daeva primigenia que otorgo deseos a mis Adalid. Busco compañía y compartir.
𝗟a cola hizo gala de destreza una vez mas cuando la punta de esta acomodo unos mechones de su cabello y retirarse finalmente.
𝗨n juego en su pregunta ante la observación pero el interés no radica ahí, solo ensancho la sonrisa cuando su cola fue retirándose del arma lentamente. Un análisis apoyado en milenios de existencia cuando intuye que el hombre es un tipo de cazador, su postre favorito, solo en su mirar se podía notar el descaro divino con el que observaba al hombre para captar su esencia.
— Soujiro, querido...llevo encarcelada en Damāvand muchos milenios, una aburrida y solitaria montaña sin visitas. 𝖍𝖆𝖍𝖆𝖍𝖆...
𝗦i quiso dar pena en algún momento, no pudo conseguirlo y menos cuando la cola que se agitaba traviesa fue directa al rostro ajeno para tomarlo y reclamar toda su atención para que la mirara a los ojos.
— Comprenderás que estoy aburrida, en antaño fui la Daeva primigenia que otorgo deseos a mis Adalid. Busco compañía y compartir.
𝗟a cola hizo gala de destreza una vez mas cuando la punta de esta acomodo unos mechones de su cabello y retirarse finalmente.
Soujiro · 26-30, M
Cuidadoso en todo momento, aunque su expresion en lugar de mostrar alguna clase de desden, es afable a su manera; una apertura silenciosa para permitirle hablar, despues de todo la curiosidad es mas poderosa que sus propios instintos de peligro, y mejor que nadie conoce lo que detras del interes podria estarle esperando.
Sus dedos no soltaron el mango de la espada hasta sentir como el empuje de la pesada cola la volvio a guardar, ojos bajaron un momento solo para con ello dar, llamativo, parece que de estaba previendo alguna clase de respuesta por su parte, reconoce que es lista, mas de lo que parece.
—Interesante... creo que es un parecer compartido entonces. Hasta ahora, ninguna criatura que de casualidad me he encontrado... se ha visto tan afable.
Le regreso la mirada, ojos de ambos encontrandose, entrecerro sus parpados de tal manera que, pareceria estarle analizando.
—Te escucho.
Sus dedos no soltaron el mango de la espada hasta sentir como el empuje de la pesada cola la volvio a guardar, ojos bajaron un momento solo para con ello dar, llamativo, parece que de estaba previendo alguna clase de respuesta por su parte, reconoce que es lista, mas de lo que parece.
—Interesante... creo que es un parecer compartido entonces. Hasta ahora, ninguna criatura que de casualidad me he encontrado... se ha visto tan afable.
Le regreso la mirada, ojos de ambos encontrandose, entrecerro sus parpados de tal manera que, pareceria estarle analizando.
—Te escucho.
ahridahaka · F
— Entonces se ve que no me conoce adecuadamente.
𝗣untualizar coqueta ante la etiqueta de la agresividad, mas solo enmarco mas su sonreír al obtener el nombre. Pero en parte no estaba equivocado el humano, estaba ante Ahzi Dahaka, la primera Daeva nacida de la mas antigua religión monoteísta, del mismo corazón de la olvidada Persia, milenios son los que lleva acompañando las noches para sembrar discordia y mas aun el tiempo que lleva encarcelada.
— Mis intenciones son solo charlar y ofrecer por que...
𝗥epentina pausa, el andar se hace presente y la aproximación inminente, la criatura no despega el mirar magnético del semblante ajeno. Solo a escasos centímetros dándole total libertad de interpretar las acciones como el quisiera, la ágil cola de la deidad tomo el mango del arma y empujo de nuevo hacia dentro para enfundarla completamente y relamerse las comisuras con una flexible lengua bífida.
— Eres un humano interesante.
𝗣untualizar coqueta ante la etiqueta de la agresividad, mas solo enmarco mas su sonreír al obtener el nombre. Pero en parte no estaba equivocado el humano, estaba ante Ahzi Dahaka, la primera Daeva nacida de la mas antigua religión monoteísta, del mismo corazón de la olvidada Persia, milenios son los que lleva acompañando las noches para sembrar discordia y mas aun el tiempo que lleva encarcelada.
— Mis intenciones son solo charlar y ofrecer por que...
𝗥epentina pausa, el andar se hace presente y la aproximación inminente, la criatura no despega el mirar magnético del semblante ajeno. Solo a escasos centímetros dándole total libertad de interpretar las acciones como el quisiera, la ágil cola de la deidad tomo el mango del arma y empujo de nuevo hacia dentro para enfundarla completamente y relamerse las comisuras con una flexible lengua bífida.
— Eres un humano interesante.
Soujiro · 26-30, M
Se mostraba atento, por mas que su postura aparentara algo diferente, siempre era asi con las sorpresas de parte de desconocidos. La femina en un inicio solo le daba posibilidades de ser alguna clase de transeunte sin mas, quizas alguna clase de bandido, pero, la revelacion sin ninguna clase de miramientos lo hizo detenerse un momento.
-Ahzi Dahaka.
Ha leido ese nombre, en alguna caceria del desierto ha figurado como una criatura antigua, perteneciente a alguna clase de bestiario de medio oriente. Si bien, como cazador ha tenido encuentros con distintos seres, este en particular le hizo mantener la guardia.
Si mentia, o tal vez no, debe mantenerse ante todo cuidadoso.
De esto, una leve risa emergio de sus labios. -Bien, eso no es un nombre que se escuche comunmente, aunque me sorprende que no haya venido con un ataque de buenas a primeras. Llamame Soujiro. A que debo la intervencion?
-Ahzi Dahaka.
Ha leido ese nombre, en alguna caceria del desierto ha figurado como una criatura antigua, perteneciente a alguna clase de bestiario de medio oriente. Si bien, como cazador ha tenido encuentros con distintos seres, este en particular le hizo mantener la guardia.
Si mentia, o tal vez no, debe mantenerse ante todo cuidadoso.
De esto, una leve risa emergio de sus labios. -Bien, eso no es un nombre que se escuche comunmente, aunque me sorprende que no haya venido con un ataque de buenas a primeras. Llamame Soujiro. A que debo la intervencion?
ahridahaka · F
— 𝐇𝖊𝖍𝖊...Empujar ese sentimiento es mi aliento.
𝑽estida únicamente con diferentes tonos de pieles, la Daeva agito su larga cola acompañando una enigmática sonrisa que desfilo una larga hilera de colmillos blancos.
— Humano, deseo saber su nombre. Estas ante la Gran Serpiente Zahhak, La Primigenia y Perdurable, yo soy Dragona de 3 cabezas portadora de decadencia, corrupción y tentación. Daeva nacida fruta de Angra Mainyu. Soy 𝐀𝐡𝐳𝐢 𝐃𝐚𝐡𝐚𝐤𝐚.
𝑽estida únicamente con diferentes tonos de pieles, la Daeva agito su larga cola acompañando una enigmática sonrisa que desfilo una larga hilera de colmillos blancos.
— Humano, deseo saber su nombre. Estas ante la Gran Serpiente Zahhak, La Primigenia y Perdurable, yo soy Dragona de 3 cabezas portadora de decadencia, corrupción y tentación. Daeva nacida fruta de Angra Mainyu. Soy 𝐀𝐡𝐳𝐢 𝐃𝐚𝐡𝐚𝐤𝐚.
Soujiro · 26-30, M
—O un regalo para quien sabe aprovecharla
ahridahaka · F
— La curiosidad de conocer las cosas ha sido entregada a los hombres como un castigo.
Add a comment...