— Que hedor, cuanta pestilencia creo que no soy yo.
-Hacía acto de presencia tras Soujiro, contemplando la escena tan patética y hostigante de unos enormes pechos en el rostro de aquel al cual le quito la virginidad. Obviamente no iba a hacer escándalo alguno, simplemente se echo a reír divertida, negando rotundamente mientras se cruzaba de brazos. -
— Pobres chicas que no saben como llamar la atención de un Izanagi. ~ Utilizan métodos tan arcaicos.
- Simplemente decidió seguir por delante su camino. -
Timidez no seria la palabra que yo usa...-Sus ojos se vieron oscurecidos por la posicion de sus senos sobre su cara, iba a protestar de nuevo pero estaba seguro que solo empeoraria su situacion- Eh, han pasado tantas cosas, la verdad resumirlo consistiria solo en: Guerras, muertos, sangre, resulto divertido al inicio hasta que en verdad pense que perderia la vida.
— No seas tan tímido — aplasta su cara con sus pechos — bien... ¿Que haz estado haciendo? Aun eres soltero o ya que juntaste con alguna insípida mujer que no te deja salir ni a la esquina por un trago ¿Mhm? No bebo pero por ti lo intentaría aunque después vomite
Parece que no te pesa en nada tener que matar a diestra y siniestra. Irónico, creo que eres el primer demonio sin una pizca de interés por salvaguardar a algún humano, algo un tanto contradictorio. -Cerro uno de sus párpados, el tacto de sus senos sobre su cabeza se hizo presente- Alzó la vista, un tanto tratando de removerse- Oye, no soy una mesa
— Pff cuando eso pasa es mi obligación señalarle la boca para siempre, en fin no me molestó jamás después de que se lanzó por una ventana — desapareció por un instante sin embargo apareció tras del joven y frotó sus hombros para luego recargar sus grandes pechos sobre la cabeza ajena — Esos idiotas pronunciaron mi nombre en su lengua pero lo que no sabían era que tenían que pagar por ello a excepción del maestro invocado Mmhm
— Era muy joven...inexperta y sin saberlo le di mi verdadero nombre al exorcista, para los que no saben si obtienes el verdadero nombre de un demonio puedes conjurarlo, sellarlo o expulsarlo, también usando magia antiguas puedes controlar su voluntad Pff que idiota fui
Tu? Invadiendo cuerpos? De cierta forma no se me hace muy extraño, con la manera que prefieres la autoridad, aunque eso ultimo es un tanto nuevo. Al menos lo hizo correctamente, o regresaste a la niña en cuanto pudiste?
— Cuando era joven....un demonio inexperto que solo le gustaba bromear, poseía el cuerpo de los humanos Mmhm te pareces al último sacerdote que logró expulsarme del cuerpo de una chiquilla
