-Había notado ya ese gesto de hacerle repetir sus palabras, no era molesto, pero chocaba con lo que su mente le tenía ya por costumbre grabado. Sus nervios por decir algo incorrecto fueron descendiendo, hasta permitirle respirar como se debía, pacifica, retribuyendo la paz que el albino dejaba en ella.-

Tú a mi me gustas también...

-Acompañó su declaración con una sonrisa de lo más sincera, que le salía tan natural que podía olvidarse rápidamente que estaba ahí en su rostro.-

¿Esta vez si me escuchaste? -Bromeo con ello, para recriminar que la hiciera repetirse a modo de juego.-

Una aglomeración de sentimientos en carne viva, no podía contra ella cuando sus palabras eran así de directas, simplemente era fácil que lo volviera vulnerable cuando sus reacciones se cargaban con esa enorme belleza tanto de sus nervios como también lo directo de sus palabras

Ese pequeño avance le gustaba verlo plasmado en sus acciones. Una mezcla de orgullo y ese sentimiento que los une

—Podrías repetirlo? Creo que no escuche bien

Y si, con la malicia del mundo se lo dijo, más bien, retaba sus propios nervios al darle el chance de repetirse, con una voz quizás más firme

-No sabía que tan bueno era que el albino la conociera tan bien como para anticipar que, en efecto, esa sola pregunta casi la hace pedirle disculpas con pánico, pero, solo alcanzó a sentir el aumento en su ritmo cardíaco cuando el resto de palabras le ayudaron a relajarse.-

Tú a mi...

-Hizo una pequeñísima pausa, quería decirlo bien, sin esos estorbosos nervios de por medio. Carraspeo para aclarar su voz y entonces le dijo, con más convicción.-

... me gustas también.

-Lo dudas?-

Agregaria con una sonrisa dibujada sobre sus labios, aunque, racionalizo sus propias palabras, si tan siquiera lo dejara asi quizas ella pensaria que seria malo responderle. Con esto en mente agregaria luego de la primera pregunta.

-Porque; gustarme es en si mismo solo la punta del iceberg, en relacion a todo lo que me haces sentir

-Era una oración tan simple, corta y sencilla... que parecía irracional todo lo que provocaba en su cabeza. Por un segundo se quedó contemplando su rostro y luego soltó una risa torpe a la que se unieron ambas manos temblorosas.-

¿Enserio?

-Tartamudeo sin darse cuenta y por supuesto su pregunta iba encaminada a descartar estar teniendo una alucinación.-

La atrajo un poco más hacia el, era todo lo que quería escuchar, tampoco iba a darle demasiada tarea de hacerla hablar. Esos pequeños avances, esa forma en cómo poco a poco empezaba a salir de su cascarón, ella no tenía idea cuán feliz era de ecucharla

Pero ahora también el debía corresponderle

Con esto susurrante a su oído expresaría —A mi me gustas tú—

Me gusta mucho... -Lo dijo en voz baja, por si su respuesta era errónea poder corregirla enseguida, siempre estaba pendiente de las palabras y acciones en él, pues quería conservar esa sonrisa en su rostro, era su mayor deseo.-

Te gusta?

-Presionaria un poco sobre eso, muy por lo oculto tenia esa hermosa mala intencion de escucharla a ella expresarse sobre algo que saliera de su iniciativa.-

Ese peinado te luce... -Es mala hablando en situaciones dónde se pone principalmente nerviosa.-