Estoy estoy bien..creo..la verdad no supe que ha sucedido, pero el sirviente me ha pedido que me aleje de aquello, yo..no pude saber que pasaba, solo buscaba ayudar a una persona..

*sonrió de manera timida, era claro que en esos momentos cuando solo podia confiar en su buen oido no le ayudara como el pensaba, y mas que ayudar entorpecía; y fue cuando recordó el regaño del noble sobre su ceguera y como era considerado peor que un perro borrando de inmediato aquella timida sonrisa en algo mas nostalgico*

He, tambien estaba por buscar una tienda de incienso, le pedi al sirviente que e ayudara pero se ha tardado.
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— ¡De inmediato lo buscaremos.—

Posiblemente buscaría en alguna tienda especializada.

—¡Esta loco Señor!, ¡Mi deber es atenderle es claro que no puede aceptar dicho objeto!.—

Realmente quería aceptarlo pero tenía el sirviente un mal presentimiento si tomaba aquel objeto.

— ¡Señor se encuentra bien!—

Se acercó un sirviente ahora de menor edad r incluso parecía ser el mismo hombre que parece que le había ayudado la otra vez en su borrachera con la notable diferencia de vestimenta y no poseía lentes.

— escuché que hubo un escándalo.—

Por favor, si tiene un poco de incienso también se lo agradecería aunque no sé si aquí se use éso..

*Busco entre sus mangas pero no encontró nada, recordó que los dejo en su otro traje y suspiró, solo saco una pieza de jade*

Solo puedo pagarle con ésto..

—¿Señor Xiao?, Se encuentra mal.. puedo ahora mismo preparar un té para que se relaje... Vamos—

El viejo precio ser servicial incluso guiando con cautela al joven dentro del resinto.

*Se dejó llevar por el hombre anciano sin saber que ocurría, simplemente su cabello ondeando en cada paso se veía hasta perderse en una esquina*

Quizá estoy un poco confundido, no he dormido bien.

—¿Señor Yoon?, ¡De que habla señor Xiao!, Debe estar delirando posiblemente por la mala sensación que causa aquel mundado hombre... ¡Vámonos!—

Lo jalo de la manga para alejarlo de tal adúltero el cuál observaba fijamente con una sonrisa pícara al "señor" de apariencia delicada.

Esa situación es como si se hubiera puesto de cabeza.

Que es lo que está pasando? Escuche mucho ruido pero.
*Mordió sus labios y apretó sus manos sin saber realmente que ocurría, en verdad cada vez se sintió más vulnerable al no saber que sucedía. Era muy diferente al xiao que estaba en batallas y usaba sus sentidos para guiarse y saber exactamente donde estaba el enemigo, a estar en una residencia con varios sirvientes que iban y venían continuamente llegando a sentirse como un ave de corral o algún animalito que cayó cautivo y olvidó cono regresar a su hábitat; así una mano fue jalandolo*

El señor Yoon está bien?

Parecía ser un escenario alterno como una especie de sueño donde el dueño de la casa sería otro Lord el cuál sé encontraba a fueras y había padecido un accidente, por el momento parecía encargarse un hombre diferente como sirviente.

— Señor Xiao vámonos de aquí, ésto es impropio y es mejor que se aleje de ese sodomita.—

Un hombre mayor trató de jalarlo para apartar al "señor invitado" lejos del adúltero el cuál tenía marcas de golpes en su rostro y una banda que indicaba ser un "plebeyo".

— ¡Maldito sucio!—

Agregó otro joven sirviente de la casa en la defensa del "señorito ciego".
Por otra parte "Seungho" parecía reírse de la situación la cuál parece tornarse enredosa.

El ruido de los sirvientes era más fuerte, Iván y venían por todos lados nerviosos haciendo sus deberes; para Xiao aquél ciego de tierras lejanas no le quedó más remedio que interrumpir su meditación en la parte trasera donde estaba una especie de mesa de madera en el exterior tradición o costumbre de muchas casas de joseon. Sin más el ciego se levantó tras preguntar estos dijeron que el señor estaba lastimado más no se atrevieron a entrar por tenor a represalias.

*Tomó aquella bandeja y dió un par de golpes, al no recibir respuesta alguna optó por entrar*

Señor traje algún médicamento y algunos aperitivos. Está usted bien?