-corresponde a aquel cálido abrazo mientras sonrie de forma cálida-

Mierda que si. Somos uno enano. Jaja y tú eres muy lindo. Te amo Daniel, lo sabes.

Con otras palabras, Sean, necesitamos uno del otro, no se puede solito.
*dice mirándolo por unos segundos luego lo abraza*
Me alegro que al menos, te tengo a ti. Eres mi todo.

-sonríe y le besa el dorso de sus pequeñas manos luego les da un ligero apretón-

Nah, ya fuiste inteligente antes. Yo solo te enseñe sobrevivir los momentos difíciles. Pero así es, juntos somos más fuertes que nunca y nadie. Gracias enano, realmente me siento en seguridad contigo. Y no te preocupes por las cosas estúpidas que hiciste hace mucho tiempo. Los niños deben aprender antes de ser adulto.

*el pequeño mira a su hermano escuchándolo luego solo sonríe*
Gracias Sean, estoy feliz de que estés orgulloso de mí, pensé que te había fallado cuando hice cosas estúpidas, pero gracias a ti por lo que soy ahora, hoy.. me enseñaste muchas cosas.
*le mira la cara al sentir como le toma la mano *
Juntos somos fuertes y luchadores, sabes que yo te proteja de todo y de todos.

Si pero..

-se encoge de hombros pero mantiene la sonrisa en sus gruesos labios-

Quiero decir que ya no tengo nada de enseñarte. Tal vez cocinar pero no es necesario porque hago yo las cosas necesarias e la casa. Pero quiero decir que ahora que sabes controlar tu poder, puedes hacer mucho más que yo.

-se coloca en una de sus rodillas y toma ambas manos del menor mientras le mira los ojos-

Y estoy orgulloso de ti. Eres fuerte, un luchador y sabes protegerte.

*mira la roca plana como salta sobre el agua con una sonrisita en los labios*
Aunque tenga el poder, ¿de qué serviría si no pudiera controlarlo?
*lo mira y lo toma de la mano*
Me enseñaste mucho y me ayudaste a controlarlo. ¿Asi que? Muchas gracias, Sean.

-sonríe después el ligero empujón luego se voltea hacia el mar y tira la roca plena haciéndola saltar en el superficie del agua por unos segundos luego fija su mirada en el menor sonriendo amablamente-

Enano. Te enseñaba todo lo que sé. Después de todo, ambos sabemos que puedes hacer mucho más que yo.

Tu me enseñaste todo, Sean... así es, tienes la razón.
*sonriendo lo empuja también *
Quiero aprender muchas más cosas, Sean.

¿Un fiestero? Ehem, disculpa pero ¿Quién te enseño hacer todo esto?

-sonríe de medio labio mientras juega con la roca plana en su mano-

Si no te había mostrado los movimientos básicas y enseñarte usar tu poder con control entonces no podríamos divertirnos hoy juntos. ¿No es así? ¿Hmm?

-pregunta de forma divertida mientras empuja el hombro ajeno de forma juguetón-

*se mueve hasta que su hermano le suelta*
Claro que puedo... pero Sean, ¿ahora en serio? Nadie podría saber que empuje la roca... deja de ser un fiestero... Todo va a ser bien. Ven, ahora es tu turno.