Supongo que fue lo mas cercano que tuvimos al contacto humano, pero sin duda fue emocionante, sentir ese "puedo morir aqui" parecia darme aun mas fuerzas
En eso tiene un buen punto~ Quizá es por eso que me divierto tanto, aún cuando en ocasiones me deja esas pequeñas oportunidades en nuestros entrenamientos. Pero sabe que no era del todo cierto que era invencible en aquél momento...
- El chico señala hacia adelante, hacia una pequeña fuente que para ambos resultaba un sitio de considerable importancia -
No eramos enteramente nosotros en aquellos momentos, aunque no era como si precisamente lo supiésemos... Estábamos mas cerca que nunca a ser solo humanos. He he~ Viniendo de mí eso suena muy irónico
¿Que hay de divertido en una batalla donde se que ganare?
-Suspira volviendo a su helado. Su actitud y palabras eran las mismas aunque se veia un poco mas emocionada debido a aquel postre-
Los gatos juegan con sus presas antes de comerlas...supongo que me gusta hacer lo mismo aunque se muy bien el final de la pelea. Es...una maldicion, hasta hace poco no disfrutaba la pelea, como ya dije...prefiero mas el sentimiento de estar al borde de la muerte
¿Desde entonces, eh? - Tsurumaru consumió un poco del helado que se derretía lentamente mas no se le oía muy convencido al respecto, quizá porque simplemente no entendía si había hecho algo particularmente sorprendente en ese momento - Enfrente de mi había una mujer totalmente desconocida... no sabía absolutamente nada de su leyenda, puede que no lo pareciese... pero cuando supe su verdadero nombre... supongo que agradecía seguir vivo. Cobro más sentido cuando comprendí el porqué no peleaba en serio
- Regresó la mirada -
Pudo matarme desde el momento en que nos vimos... y sin embargo, peleamos hasta ser interrumpidos...
-La ceja de la mujer se elevo al escucharle preguntar tal cosa, tomo asiento en la banca lamiendo de su helado-
No fue dificil si eso es lo que preguntas, no podia medirte del modo tradicional al que hacia en tiempos pasados. Fue una mision que nos llevo a nuestros limites y fuiste de los pocos que lograron llegar al final
-Su centro de atencion en el helado se cambio hacia el y solo le miro directamente-
Fuiste digno de ser mi aprendiz cuando te salve de aquella flecha
La ascensión suele elevar a un servant al punto donde es más fuerte y muchos de nosotros no sufren grandes cambios. Francamente... no puedo quitarme de la cabeza la primera vez que le vi... y el como iba con todo para matarme
- diría riendo sutilmente alejandose con destino a una banca -
¿Como fue que se sintió que tras lo sucedido en Tokyo, le pidiese que me aceptase como discípulo? Sorprendame
Dos, por favor! - pediría el albino alzando dos dedos e inmediatamente pagando
- Vería como la maquina llena los conos con extrema fascinación y los recibe en sus manos estirandole uno a Shishou -
Dicho eso... mentora ¿Como es que nos vemos nosotros? Esta apariencia es como la que mi amo Sadayasu tendría si hubiese alcanzado la mayoría de edad, sin embargo estoy aproximadamente en el rango de los mil años ¡Soy un viejo a estándares de... muchos! Ha ha ha!
Ese es un buen principio, vayamos a buscar algo así en ese caso~
- diría aceptando la propuesta y como mirando alrededor, cuando encuentra un pequeño stand en el que vendían conos de helado de vainilla -
Parece que se lleva mejor con Medb-dono... como para pedirle consejo referente a estas cosas. Es bueno tener solo una voz dando indicaciones... los servants de Chaldea tienen ideas muy sorpresivas, cada quién. Por ejemplo, Lancelot no deja hablar de que su mujer ideal es Raikou, mientras que Barbanegra enaltece a Nursery-chan o Jack-chan... aunque se me hacen muy... niñas? No entiendo como puede sentirse atraido hacia ellas
