Él se quedó observándola por un momento en lo que se acomodaba en el sofá, entrecerrando la mirada. - Podríamos ir, claro... -Comentó a la pequeña. Si ir a uno de esos conciertos era algo que quería hacer, podrían. Además al mismo antiguo le gustaba la banda desde sus inicios, le serviría hasta a él para pasar un buen rato. Ya la parte de muertos podría surgir por su cuenta, tras el show, claro está.- Hmm, los lanzallamas son pesados. ¿Crees que podrías con uno? -Agregó con algo de gracia, solo de imaginarse algo así.
Una vez la pequeña se duerme, Marcus hace un gesto a Jessica de que le trajera alguna manta para abrigarla, si bien podría haberle dicho de que la llevara a una de las recamaras, el lugar junto a la fogata se veía lo suficientemente cómodo para ella. Así que solo con el sofá y las mantas serían por ahora. Mientras que Mikhail se retiró de la sala, Jessica de quedó despierta para cuidar de la niña, de paso se encargó por las de ella de velar por el sueño de su maestro. Marcus, quien se había dormido por igual recostado en el respaldo de aquel sofá junto a la niña, parecía algo cansado.
Desde que había comenzado, por así decirlo su nuevo trabajo de 'niñera', se había estado estresando un poco más de lo normal. Si bien se tiene confianza en su poder, a veces pueden aparecer seres más poderosos que él. El hecho de cuidar de un infante para él son problemas, los niños con complicados ya de por sí, pero ya se había acostumbrado a la idea de proteger a esta pequeña ya que se encontraba sola. Además, le agradaba. Nunca se imaginó verse en tal situación, pero para todo hay una primera vez. Parecía como si fuese su hija a esta altura, era hasta irónico, gracioso.
Tal era su cansancio, que solo se logra despertar cuando escucha a la niña hablar entre sueños. De estar mejor, solo con el movimiento habría sido suficiente para abrir los ojos eh incluso parar el golpe instintivamente ya que se encontraba tan cerca de sí. Jessica fue quien se acercó y le sonrió tras ver lo que pasaba. /Maestro, ¿No quiere ir a descansar como es debido en su recamara? Yo me encargo de cuidar a la niña./ Le dijo en pensamiento, a lo que Marcus solo se estira un poco en el lugar y suspira.
-Estoy bien, no te preocupes. -Susurró para ella, con cuidado de no despertar a la niña. Vio a Sapphire de reojo luego, preguntándose si debería indagar en su mente para ver que era aquello que soñaba, pero como no la veía estresada supuso que todo estaba bien. Ella y sus aficiones después de todo, la niña era especial y peculiar en las cosas que le gustaban. Él mayor ya se acostumbró a eso también.
Marcus había soltado la idea a modo de broma, pero no tenía ningún problema con complacer la curiosidad de Sapphire si esta fuera muy persistente, digamos. Por ende solo deja salir un; -Ja,- dice en su acento alemán. -¿Por qué no? Tengo a varios enemigos que podría traer.- Y terminó esta frase con una sonrisa ladina y algo siniestra.
Mikhail rápidamente pensó en su propio maestro cuando Sapphire dice que le gusta quemar cosas, considerando que al mismo Marcus también le gustaba mucho hacer eso. No solo quemar, destruir, hacer explotar cosas y edificios, lo que fuera se le hacía divertido. -¿A qué estaría cool llevarla a un concierto de Rammstein, huh?- Dice después el líder.
-Seguro le agradaría ver a Till con su lanzallamas y otros juguetes,- agregó Jessica mientras seguía al lado de la niña.
Mientras los otros parecían no tan sorprendidos ya acerca de la forma de ser de Sapphire, a Mikhail le llamaba la atención que tan pequeña y quisiera incluso quemar a las compañeras de la escuela. Seguro le hacían bullying, supuso. Ya sobre el tema de volverse un vampiro, el peli plata se gira a ver a su maestro como a modo de pregunta. Más responde; -Pues cuando crezcas podrías ser uno también, es que al maestro no le gusta convertir niños en vampiros,- esto último se lo dijo también a modo de secreto, aunque sabe bien que Marcus puede oírlos claramente igual. –Solo tienes que quedarte cerca.
La única forma de que Marcus se atreviera a volverla vampiro, es que algún accidente ocurriera, que no le quedara de otra pero volverla para no perderla. Pero el antiguó se las creía mucho también en que su poder podría protegerla hasta que tuviera al menos dieciocho años.
-¿No tienes sueño, chiquilla? Ya es tarde. –Preguntó luego de un rato largo el más antiguo.
No sólo que los pasa a los malditos tarados que intentan ayudar a otros pero también, que les pasa a los que se quedan aquí cómo idiotas para seguir siendo los conejillos de indias de esos cretinos de los psiquiatras... He estado viviendo esto por años pero está vez no pienso jamás regresar a este maldito lugar con olor a cloro barato ni con olor a orina suspendida en el aire... Ayudame y nosotras te vas a proteger. Por favor, quitarme esa aguja con suero que me han clavado en el brazo es en realidad una especie de tranquilizante para metahumanos y este collar que anula mis poderes. Puedes desactivarla con agua.
-Efectivamente, Jane tiene en uno de sus brazos una aguja unida a un cáteter y una manguera que va directo a una bolsa que es un tranquilizante para metahumanos pero la metahumana está un tanto desesperada ya que teme que luego aquella le haga efecto pronto y la haga dormir. Y en la mesa cerca a su cabeza hay un vaso de agua con una jarra mientras su cuello luce un collar grueso con un sistema electrónico. Si la niña hace todo bien, podrán escapar de ese lugar y enfrentarse a los que lo custodian a su vez.-
- Hola... ¿Eres una niña, verdad?... No puedo acceder a mis poderes. Por favor, ayudame a salir de este maldito lugar... Estos tarados no paran de torturarme. Sólo necesito que alguién que por una maldita vez venga y me libere, me ayude a salir de aquí.
-Jane reaccionó a la pregunta a quemarropa que le lanzó la infantil y dulce voz, tratando de gritar pero al estar dopado sólo lanzaba unos leves gemidos lastimeros, acompañados entre sollozos de angustia y desesperación con un dejo de ira. Esperanzada en esa niña que venga en su auxilio y poder escapar de ese condenado lugar donde los parias, vagabundos y fenómenos cómo ella misma. Cada tortura y experimentación sobre ella es un dolor agonizante para cada una de sus personalidades, aún mucho peor que vivir en el mismo Infierno. Desde temprana edad considerada poseída y luego loca por su condición y el trauma que le aqueja por ellos por todo el daño que le ha hecho su padre; gracias a él es quién es hoy en día.-
(Hagamos un rol con gore porque el universo de Jane tiene su gore en ciertas ocasiones jajaja.)
-En un Hospital Psiquiatrico para metahumanos, o personas con poderes especiales trabajan varios especialista en psiquiatrica, ciencia o en genética ya que buscan entre sus pobres y desgraciados pacientes algo que les llame profundamente la atención mientras estudian a sus internados o los torturan para ver el alcance y potencial de sus poderes manifestados que no saben controlar. Siendo una especie de cárcel o mazmorra donde muy pocos han podido escapar.
En una de las habitaciones de dicho establecimiento se encuentra mujer de estatura baja, vestida con vestido negro largo, con mangas, llevando botines del mismo tono. Su cabello oscuro es rizado y está cortado en media melena con flequillo. Sus ojos brillantes son marrones cuya mirada suele ser hostil, profundo y un tanto desquiciada dirian algunos, cómo si aquella chica fuese muy oscura, triste y rara, demasiado rara para el promedio común.
Jane mejor conocida cómo Crazy Jane es una superheroína muy poco conocida que pertenece al equipo de la Doom Patrol, un grupo de superheroes marginados con poderes que jamás pidieron. Jane es una metahumana con 64 personalidades diferentes dentro de su mente, cada una de ellas tiene su poder especial mientras que la propia Jane, no. Aquello la hace ser una persona inestable que es considera loca o más bien, que estuviera poseída siendo la realidad es diferente.
Jane simplemente grita cómo una loca, tratando de liberarse de sus ataduras pero al estar un tanto dopada que sus sentimientos aturdidos no le permiten que pueda una personalidad manifestarse para que vaya en su auxilio, temiendo que pronto vendrá un doctor a hacer de las suyas y experimentar con ella en medio de torturas y más torturas.-
//Hermana, he cambiado de rol por uno nuevo. Por una chica incomprendida que tiene 64 personalidades dentro de su mente. Podría darle muchas amigas a Sapphire. ¿Quieres que iniciemos un nuevo rol o cambio a Lara por Jane simplemente y continuamos este mismo?.
-En un lugar muy lejano, se encuentra los vestigios de lo que alguna fue, un antiguo templo en ruinas que está un tanto tapiado con vegetación, de frondosos árboles que pareciera que están apoderandose de aquel templo. Que es iluminado no sólo con los cálidos rayos que hacen contacto con algunas piedras preciosas de color turquesa que da más iluminosidad a la zona decorando con destellos de esa misma tonacidad turquesa. En su tiempo, este lugar ságrado oculto a los ojos de la común, servía para realizar retiros espirituales donde algunos mortales renunciaban a su condición actual para dedicar en cuerpo y alma en búsqueda de la iluminación, la liberación de el ciclo continuo de reencarnaciones.
Desde el Cielo desciende un ser de luz que irradia todo a su paso, una silueta femenina con firmes curvas redondeadas, vestida con una especie de traje de guerrera hecho de vegetales y piedras color turquesas, llevando botas del mismo color, estando con sus pies separados y plantados firmemente ante ella. Su largo cabello está compuesto de gruesas hebras de plantas que caen por su espalda, decorado en una corona turquesa que el enmarca su rostro, siendo de tez color lavanda. Sus ojos brillantes son pozos color esmeraldas. Pero lo más llamativo es una especie de "halo" compuestos de varias piedras turquesas que levitan detrás y sobre su cabeza, símbolo de su condición cómo una gran deidad de la Luz.
Cetrion es una Diosa Antigua de la Virtud, de la Luz, Guardiana de la Vida y la misma Madre Naturaleza... Siendo su madre, la Titánide Kronika, guardiana de las Arenas del Tiempo y su hermano, Shinnok un Dios Caído de la Oscuridad y el Infierno... Cetrion se vió obligada a corromperse en el pasado por cumplir con su virtud ságrada de hija obediente y fiel, ya que su madre desea alterar las lineas del tiempo para forjar una nueva era, creando un dilemia díficil para la deidad que un lado: Debía siempre permanecer por el camino del bien y de la Luz gracias a sus dones y por el otro, tomar el camino del mal por condescencia hacia su madre, sin importarle que esté creará un caos para la Diosa que deligentemente cumplía con cada una de las órdenes de Kronika. Con la caída de su madre a manos del "Elegido", Cetrion recuperé en cierta forma su autonomía y continuar con su deber cómo la Madre de todas las Virtudes.-
