Estas dejando una pésima impresión para mi. — Deslizó el tacón hacia su cuello con una sonrisa maliciosa, y manifestó con su acto, una clara advertencia de que podría irle muy mal. No obstante, todo era parte de un acto travieso sin hostilidades hacia él.— deberías cambiar de profesión.

— Sonríe ante el pisotón sobre su cuerpo, mirándole desde abajo divertido. — Excelente vista. — Fue su respuesta ante el ataque de ella, bromeando como era de costumbre y ensanchando un tanto la sonrisa. — el trabajo de cazador no es muy remunerado, lo siento. —

— Le da un pisotón en el pecho, no tan fuerte, pero si los suficiente para clavar un poco el tacón.— Recibí la bufanda, no fue del todo mi gusto cazador, aunque podría hacerte más falta a ti cuando estés helado.