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User1577488 · 13-15, M
[code]el ojo de aquella princesa solo divisaría los trazos generados por sus movimientos, los cuales habían sido cortes verticales y horizontales, en total habían sido seis; únicamente sombras volando en torno a su espacio personal.

Aquellas lanzas de hielo se fragmentaron de manera inmediata, colapsando incluso en fragmentos mucho más pequeños que crearon una breve cortina de finos diamantes que reflejaron la escasa luz, y aquel joven caminó a través de ella, parecía que todo había sido planeado para que él pasara triunfal en el desastre de hielo. - ¿Por que ríes? ¿Que es tan divertido? Cuéntame... - Comentó al tiempo en que extendió ambos brazos, formando una linea recta con éstos. - Parece que las hienas no son las únicas que se ríen de la nada. - Comentó al avanzar lentamente, así mismo, otras chispas comenzaron a desprenderse de su cuerpo, ahora regenerando sus prendas.++ [/code]
User1577488 · 13-15, M
[code]grande la concentración mágica, más intenso era como lo percibían sus ojos; además del análisis inmediato de lo que acontecía.

Vislumbrando aquellos portales, pudo deducir que se trataba de un movimiento mágico adicional, concentrado en aquel cetro, parecía que dicho objeto era el medio para manifestar sus poderes. - Ya lo tengo... - Habló manifestando su pensamiento al observar. - ... Comprendo. - Achicó su mirada, preparándose para recibir cualquier cosa que saliera de aquellos portales, por lo que esta vez, no sería tomado por sorpresa.

Gélidos proyectiles fueron disparado, así mismo pudo percibir la temperatura de aquellos. Fueron disparados y, con ágiles, veloces y precisos movimientos que fueron ejecutados con ambos brazos, éste pudo cortar sin predicamento alguno aquellas estacas. Previniendo el empalamiento malintencionado de aquella ejecutora. De hecho, aquellos movimientos habían sido tan veloces que [...] [/code]
User1577488 · 13-15, M
[code], incluyendo filo. Así es, ambas extremidades se habían tornado un par de cuchillas tan afiladas que podría cortar casi cualquier material, especialmente los de carácter no divino. Aquellas cuchillas eran fueron constituidas por una reacción natural, resaltando y solidificando todo el carbón en su cuerpo al grado de incluso mantenerse más resistente que el más fuerte de los metales jamás creados, además de que era ligero. - No, no lo absorbí... solo fue retenido y redirigido. - Comentó el pelirrojo.

Su mirada, se mantuvo fija en la peli-rosada, parecía un conejillo asustado al temblar tras encontrarse a una fiera que parecía implacable hasta terminar con su objetivo, atraparle.

La visión de aquel homúnculo, era muy distinta a la humana, pues el solo éra capaz de percibir el mundo que le rodeaba en una escala de rojos que, repentinamente, cuando sucedía algún fenómeno relacionado a la magia, se agregaban manchas de tono azulado, mientras más [...][/cod
User1577488 · 13-15, M
[code]++ Gran insensibilidad al dolor que cualquiera podría confundir con un increíble estoicismo por su parte, pues nadie podría a resistir los daños de aquella descarga.

Aquel comenzaba a avanzar con una gélida mirada hacia la engreída princesa, por un momento aquella expresión de terror en la contraria le producía cierta satisfacción ¿Que era ese sentir? No lo comprendía del todo, pero tal vez se debía al resultado de haber permanecer junto al Doctor Dee, copiando sus modos y tendencias. Si, de alguna manera le complacía. - Tonta humana, eres un ser tan inferior que no tienes derecho a saber lo que soy, pero... como su extinción esta próxima, lo sabrás... Soy un ser superior a los humanos, como hechicera, deberás conocer el término: Homúnculo. -

Aquel caminó tranquilamente, mientras su brazos comenzaron a adquirir un tono negruzco, especialmente su piel, sus manos habían desaparecido adquiriendo una forma metálica [...] [/code]
Sa1578509 · 18-21, F
[code](...)El palacio podría aguantar o quedar hecho trizas, pero hombres habrían en exceso para reparar las averías de su mal genio y sus exabruptos. Esclavos y tontos útiles habrían a por montón encerrados en los calabozos de las plantas subterráneas de su palacio. Se quedaría tan tranquila y satisfecha, riéndose de la grandiosa sacudida sísmica.

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Sa1578509 · 18-21, F
[code]...metal y que no tenía puesta alguna joya de metal que pudiera haberla incluido en ese ataque. Rió al verse inmaculada como un tesoro vivo que jamás podría ser tocado o alcanzado por el contacto inmundo de un grosero plebeyo. Concluyó, desapareciendo esa mueca confiada, entusiasmada y malévola volviéndose tan seria y aguda.

Ya veo… Absorbiste mi magia…Heriste y asesinaste cruelmente a mis soldados y ahora vienes por mi cabeza, ¿no es así?

Agrietó el suelo al sacudir su cetro de madera que rápido propulso un centenar de estacas de hielo puntiagudas del tamaño de un brazo que se dispararon por todo el ancho circuito, incluso desde arriba y desde bajo. Aquí, parpadeó por el esfuerzo abriendo tres portales divinos para aumentar su ofensiva. Esta magia materializaría un millar de proyectiles gélidos que le darían un seguro escarnio y una muerte tortuosa al incrustarlo por todos los ángulos hasta empalarlo vivo (...)

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Sa1578509 · 18-21, F
[code]Parecía una estatua de extraordinaria belleza que había escapado por obra y gracia del espíritu santo del alcance de aquel bramido invertido de su propio fatídico electrochoque.

…¿E-…Eres un mago?

Dedujo, revelando con su melodiosa voz inmaculada como la brisa de una tierna caricia.

En éste Reino, solo existen tres héroes. Yo soy la única portadora de magia. Los demás poseen otras cualidades. ¿Qué es lo que está sucediendo?...¿Quién…quién eres tú?...

No llegaba a inferir una conjetura racional, ella no era una estratega como su hermana menor. Pero, algo de lógica debía captar por los hechos testimoniados. De repente, respiró, se calmó y se cercioró de estar totalmente intacta e ilesa, y luego sonrió al reconocer que estaba vestida de seda pura y lino transparente, que su calzado no estaba fabricado de siquiera alguna microfibra de (...)

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Sa1578509 · 18-21, F
[code]y atravesó cruzando los petos de su batallón hasta clavarse en los costados de sus corazones, haciendo presa del miedo a los presentes mientras a la par gritaban y caían al suelo como recios costales de carne convulsionando entre mortales descargas eléctricas que aún después de muertos los seguían sacudiendo hasta reventarles a temblores sus sistemas nerviosos.

¿Có-...Có-Cómo te atreves...?!...

Exclamó la pelirrosa que permanecía quieta y suspendida en conmoción en medio del horrendo siniestro, sus orbes como joyas esmeraldas estaban desenfocadas, sus labios de aterciopeladas y jugosas cerezas, fríos y abiertos con un gesto incrédulo y boquiabierto con un rictus nervioso que la paralizaba desde la médula.(...)

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Sa1578509 · 18-21, F
[code]al buscar raudamente en una fracción de segundo de izquierda a derecha, de arriba abajo, pero…No había nada nada. Algo pintaba extraño pero le daba tanto regocijo sostener la correa y la montura del dominio sobre sus presas.

Tal parece que los monstruos también pueden sangrar…

Se burló y estalló en carcajadas, olvidándose del ausente ruido errabundo de su maná liberado para luego sostener y afianzar de nueva cuenta su cetro, ansiosa por la revancha que su padre le había encomendado: Debía someter y quemar vivos a esos miserables esclavos rebeldes a fin de reforzar su imperio bárbaro. Pero, en ese momento un arpón de energía lumínica ondeó en el aire, tomó vuelto y salió rápido vibrando vertiginosamente como un rayo que se dividió en veinte rutas (...)

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Sa1578509 · 18-21, F
[code]El olor a carne chamuscada en la caliente atmósfera llegaba a las fosas nasales de la ególatra y narcisista Princesa Flare, se regodeaba de haberle atizado infaliblemente un disparo de 410 vóltios que si no llegaba a matarlo seguro que le dejaría extraviado, desvencijado y manchado de linfa sobre su elegante estructura. Chequeó entonces con una sonrisa al desdibujarse poco a poco la humareda dejando entrever detrás de sí la silueta semidesnuda y al rojo vivo del caballero con jirones de ropa que censuraban su virilidad en compañía de unas chispas volatilizándose alrededor de aquella maraña de cabellos pelirrojos sin afectarle demasiado. Aún su poder imponente e irresistible estaba materializado y encapsulado dentro de la cámara del trono. ¿Pero, dónde? Discutió internamente (...)

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