« Back to Album · Next »
This page is a permanent link to the comment below. See all comments »
SK1581973 · F
Aquella dicha que sentía se expresó en forma de una tenue risa, correspondiendo a la contagiosa del peliazul. —¿Oh? Entonces contamos con la bendición del Santuario de la Isla Narukami, confío plenamente en que nuestro día irá de maravilla.— Negaba de un lado a otro con su cabeza, más que buena fortuna, para ella con el simple hecho de que Kaeya estuviera presente, ya hacía de su día bastante agradable; sin necesidad de alguna buena predicción o buena fortuna.
—Lo es, se supone los cumpleaños deben celebrarse con amigos, quizá en alguna casa de té o restaurante. Debo admitir que me gustaría tener una celebración convencional alguna vez. No se siente tan personal recibir obsequios de las Miko o de la gente en Watatsumi. Es como una señal de respeto por mí cargo.— No pudo evitar dar un suspiro prolongado. En cierto modo extrañaba a Lumine, era de las pocas personas que podía considerar cómo amiga y no era vista solo como la sacerdotisa de Watatsumi. Con ella y Paimon se sentía como c
—Lo es, se supone los cumpleaños deben celebrarse con amigos, quizá en alguna casa de té o restaurante. Debo admitir que me gustaría tener una celebración convencional alguna vez. No se siente tan personal recibir obsequios de las Miko o de la gente en Watatsumi. Es como una señal de respeto por mí cargo.— No pudo evitar dar un suspiro prolongado. En cierto modo extrañaba a Lumine, era de las pocas personas que podía considerar cómo amiga y no era vista solo como la sacerdotisa de Watatsumi. Con ella y Paimon se sentía como c
Add a comment...