Realmente esperaba que el menor se apartará en cuanto sintiera el contacto ya que escorpio era conocido por ir provocando todo tipo de peleas o situaciones complicadas sin realmente terminarlas o incluso directamente las abandonaba.
Pero la pasión y entrega que le demostró el menor despertó de golpe sus instintos, causando que sonriera ligeramente para después proceder a invadir su boca despacio, tratando de saborear su esencia y euforia, procurando no perder ningún detalle de está y separándose solo un poco para dejarle tomar una bocanada de aire.

-Realmente no creo que se buena idea seguir con esto... Al menos no aquí- Le dijo por lo bajo -El pasillo es muy "publico" para mi gusto...- Se acerco despacio a su oreja, propinando un ligero beso en su lóbulo derecho- Es tu ultima oportunidad para detenernos Daren... si no lo aprovechas ahora, no seré capaz de detenerme después... me conozco demasiado bien-

No estaba acostumbrado a que le robaran besos, menos alguien a quién ya estaba tratando de besar, sin embargo lo respondió como mejor pudo, con la misma agresividad y desesperación que el mayor lo había besado. Daren era alguien pasional y nunca se había limitado en demostrarlo. Sus manos rodearon de inmediato el cuello ajeno, atrayendo su rostro aún más. Sentía el cuerpo quemarse, tanto deseo acumulado lo hacía sentir que explotaría en cualquier momento.

La acciones del otro de inmediato le dibujaron una sonrisa enorme en su rostro, el chico le llamaba la atención desde hace tiempo y que le mostrara ese ímpetu hacia su persona era algo que realmente le provocaba bastante euforia -Ja ¿Yo te estoy volviendo loco?... ¡Tu eres el que me está volviendo loco a mí!- Y no pudo evitarlo, le propino un beso aprovechando el acercamiento del otro, impactando con un poco de fuerza pero sin herir al moreno o al menos eso pretendía.

— ¡Aquí, ahora! —Arrojó el letrero hacia un lado, caminando con paso firme hacia él. Sus manos se aferraron a las solapas de su camisa, atrayendolo de golpe, su rostro se acercó también y estuvo a punto de besarlo, en un ataque de deseo— ¡Me estás volviendo loco!

Iba saliendo de su habitación y se quedo atónito en el acto -A... Buenos días- Leyó dos veces el letrero para saber si no era por el sueño que había leído mal -Amm... pues si, si quieres pero... ¿Aquí?-