- Otra vena salio a su sien. Fran y el eran simi... no ¡Asquerosamente iguales! Ya estaba pensando divertido en dejarlo como un misero alfiletero. Tuvo que respirar al acordarse de que llevaba siempre consigo el comunicador de los Varia. Seguramente su jefe, Xanxus ya lo habia oido todo. Debia calmarse. Una de las reglas de los Varia, es que no podía matar sin autorizacion previa. - Eres.. ¡Desesperante! - Respondio tras dar un suspiro y sonreir forzado. Se iba a vengar, eso es seguro. -
*El joven de cabellos negros no parecía inmutarse ante lo que el otro decía. Se veía al rubio bastante cabreado como si aquella insana obsesión por su fleco y la respuesta del joven de la sombra canina hubieran sido un combo explosivo*...
- Se le acerca por detras, apoyandose en sus hombros. Uno de los cuchillos de plata se desliza de sus dedos, deteniendose a escasos centímetros del otro. Sonrie algo macabro - Ah si, me lo cortare el dia que pierdas esa cara de estupido, lo cual va a tardar mucho. Asi que, mientras tanto que yo me vea sublime a tu lado, pedazo de mierda, no te metas con mi fleco si te corroe la maldita envidia ¿Estamos?
Ushishishi~ lo se... quiza algún día aproveche tus siestas para experimentar contigo. Quiero ver de que grueso son tus intestinos ¿Seran negros como tu perro?
