— Si que quieres extorsionarme de mil maneras. Bien, vayamos a un lugar que no sea este, es muy público para que podamos discutir una negociación tranquilamente

Estaba claro que ella no quería negociar con él, quería asesinarlo, aún así se calmaría para mirarlo con los ojos entornados y una ira contenida que inflaba su pecho, ¿Iba a jugar rudo con ella? Veríamos quién ríe al último, necesitaba pasarle rápido el reporte a Lloyd.

Iba a destruirla, de algún u otro modo arruinaría su vida por mancillar el nombre de su amada hermana de tal manera. Tales palabras no se quedarían sin su meritorio castigo.

Escudriñó sus rojos ojos cuando lo agarró de tal manera, sabía que ella lo podría matar, pero no tenía ningún tipo de miedo. Hasta deseaba que lo golpee.

— Entonces, si tu vida es más importante que la de un perro militar. Me parece que tendrémos que negociar para que no te la arruine ¿No crees?

La arruinaría de todos modos, de una u otra forma.

— Hablando de vídeos, quizás te agradaría ver unos de tu hermanita

Estaba claro que iba a jugarle a la misma porque no creía que tuviese nada real de ella y Lloyd, normalmente su relación era muy profesional. Le tomó del cuello de la camisa con bastante fuerza mientras lo escuchaba, estaba claro que era un imbécil, las ganas de golpearlo la impulsaban pero suavizó el agarre y lo soltó para simplemente darle la espalda.

— Si, mi vida vale más que la tuya, perro militar

— ¿Photoshop? ¿Entonces el video también es editado? No me toques las narices. Arruinaré a Forger y de paso me llevaré tu estúpida carrera por delante. Iba a mantener en anonimato quien era la amante de ese tipo. Pero te metiste con la persona más preciada en mi vida.

La sangre le bombeaba de manera tan rápida y caliente por todo el cuerpo que estaba sumamente envalentonado. Arrugó la foto en su puño.

— Golpéame, anda. Rómpeme la nariz y déjame tirado en el suelo. Mátame si quieres. Pero eso no va a detener que tu carrera y tu vida se hunda. Podrás enterrarme diez metros en la tierra. Pero tu vida será insignificante, valdrá mucho menos que mi muerte.

Ya el SSS la tenía harta, más aquel chico que estaba investigando su relación con Lloyd. Claro que al ver la fotografía se estremeció un poco para simplemente respirar hondo y cruzarse de brazos.

— Cuántas ganas tienes de arruinar el matrimonio de tu hermana que hasta contrataste un Photoshop de mala calidad. ¿Quieres chantajearme niño? Créeme que no te voy a dejar, nada me impide darte una paliza

Apretó sus mandíbulas de tal manera que se estaba haciendo daño, incluso podría escuchar sus piezas dentales crujir.

Pero no se iba a quedar atrás, mucho menos con lo que sabía (y tenía)

— Eres muy cercana a la familia Forger ¿Verdad? No me extraña que sepas el tono de voz de mi hermana. Estoy seguro que también conoces el de Loid...

De su chaqueta sacó una foto. Parecía haber sido sacada en la oscuridad, pero las siluetas se podían ver distinguir muy bien. Un hombre alto y una mujer baja, pero con una figura muy definida y largas orejas.

— Me pregunto cuanto tomará arruinar la carrera de una heroína. Creo que pocas horas ¿Tú que dices?

— Que mis orejas son sensibles y tu hermana si que gime fuerte

La tenía harta, si iba a haber pelea ella no retrocedería, se acercaría y pegaría su frente a la ajena dando a relucir esos ojos rojos brillantes

— ¿Algo que decir? Perro militar

Su mirada cambió completamente. En un inicio estaba a la ofensiva de una manera normal. Ahora estaba frío, como si tuviera la mirada perdida, dispuesto a matar.

— ¿Qué acabas de decir...?

— Si, disculpa estoy algo ensordecida después de visitar ayer a tu linda hermana

Mostró los dientes en modo de amenaza.

—¿Ah? ¿Tienes sucias las orejas que no escuchas bien?