« Back to Album · Next »
 
Newest First | Oldest First
RsL1574861 · M
Realizó una reverencia para despedirse de ella, como agradecimiento y respeto por la autoridad que poseía dentro de aquella casa. Esperó a que se marchara, escuchando el sonido de los escalones, y allí recobró la postura para dirigirse al hombre que tenía delante. Una conversación larga los esperaba, un golpe de realidad que sería tan doloroso como devastador para él pero, a su vez, una oportunidad de no volverse loco cumpliendo con deberes que podía realizar sin la mayor dificultad: Ser guardaespaldas de aquella chiquilla que conociera y fuera la menor de aquella familia, Hanamiya Akemi.
— Yo también lo espero. —Sintió la desazón de no sentirse correspondida, pero no podía pedir demasido de una persona tan consternada. Bajó la mirada y solo lo estrechó más fuerte, hasta que una voz familiar le llamó la atención. Miró a su padre, acompañado de su hermano y la mirada que ambos le dieron la hizo sonrojar. Se incorporó, ayudada por el caballero, y sacudió la falda del vestido. No era tonta, sabía que estaban esperando a que se retirara porque esos temas no eran de su incumbencia.— Padre, hermano, Regulus, me retiro. —Hizo una pequeña reverencia y al pasar junto al hombre camino a las escaleras le susurró.— Suerte.
RsL1574861 · M
¿Qué podía ser más peligroso que eso? Intentó imaginar, pero su mente tan limitada por la época no logró generar algo siquiera cercano a la realidad. Se sentía devastado, perdido y al mismo tiempo como un tonto por no poder recordar qué lo había llevado hasta ahí. Pero cierto ánimo regresó a él ante la confesión juvenil, ante ese cálido gesto que le representó el abrazo de la mujer. La observó con sorpresa y tuvo miedo de corresponder a su gesto pensando que la armadura podía llegar a lastimarla.— Espero que posea razón, Hanamiya-san —Llamó. Pero sus ojos terminaron por prestar atención al hombre que carraspeó, ese mismo que le había pedido esperar en la habitación.— Gracias, Hanamiya-san. —Repitió. Con cuidado, tomó las manos de la chica para apartarlas, colocarse en pie y ayudarla a ella también.— ¿Hay alguna forma de que pueda regresar a mi hogar, señor? —Preguntó. Pero sentía que la respuesta sería negativa, después de todo, sus caras no mostraban alegría sino decepción
— Un microondas solo calienta la comida, existen cosas peligrosas afuera, pero no porque quieran hacer daño, sino porque pueden causar un accidente. —¿Cómo explicarle sobre los autos? ¿Sobre la delincuencia? ¿Cómo enseñarle a usar el dinero? ¿Las nuevas costumbres? ¿Las tradiciones? Incluso un rallador podía ser peligroso sino se sabía usar.— Regulus, yo creo que a como llegó a esta época, se puede volver al pasado. Debe funcionar a la inversa, solo deben descubrir cómo. —Sintió el impulso de abrazarlo y así lo hizo, lo rodeó con sus brazos por el cuello, dejando que que reposara el rostro sobre su hombro, fue un intento desesperado por reconfortar, no podía darle la espalda, no cuando el dolor era tan visible.— Yo confío en que lo logre, en que pueda regresar con los que ama. No perdamos la esperanza.
RsL1574861 · M
La miró con duda, con intriga incluso. ¿Qué podía ser peor que estar completamente perdido en otra época? Se sentía tan tonto y a la vez extraño, el mundo ya no era nada de lo que recordaba y parecía que tendría que aprender absolutamente todo de nuevo.— ¿Qué podría ser peor que un micro ondas? —Preguntó. Realmente la preocupación se mostró en sus ojos, en su rostro, pero permaneció totalmente atento a ella.— Hanamiya-san, ¿cree que exista una solución a mi problema? —Sintió la necesidad de encontrar consuelo. Tanto el cabecilla de familia como el otro hombre que estaba con él, especulaban que aquello no tenía solución, no en ese año al menos. Sintió temor, porque su madre probablemente estaría llorando ahora por él, viviendo el duelo que la guerra lleva hasta los hogares— Quisiera saber la verdad. ¿Podré regresar a mi hogar algún día? ¿A mi época?
Suspiró, relajándose, esperaba haber mermado un poco la angustia que él parecía sentir. ¿Pero qué se que decía a alguien que al parecer venía de otra época? Ella solo había leído libros y por lo que estos mostraban era un lugar más crudo y cruel, nada a lo que ella estaba acostumbrada.— Espere a que vuelva, debe estar buscando una solución. Afuera hay peores cosas que un microondas, le haré compañía en lo que vuelve, así no se sentirá tan solo. —Se aclaró la garganta y usó la izquierda para quitarse algunas lágrimas.— Intentaré responder las dudas que tenga.
RsL1574861 · M
— Ya veo. —El tiempo cambiaba, la paz estaba más presente y ello lo demostraba la tranquilidad con ella le explicaba todo. Por un momento consideró que aquel tiempo no podía ser tan malo, no cuando se veía todo tan pulcro y relajado. Como le habría gustado que su familia estuviera allí. Solamente quedaba resignarse a vivir allí hasta que pudiera averiguar lo sucedido.— Pero... No puedo quedarme. Debería buscar un refugio para mí y mi caballo... —Observó el jardín, donde había aparecido, pero allí no estaba el blanco corcel, solo él.— Parece que lo perdí también... Pero no debería quedarme, el señor de esta casa me dijo que pensaría otros planes. Quedarme aquí no sería buena idea.
— Existen los conflictos, pero nadie debe ir a morir a la guerra, se llegan a acuerdos diplomáticos. —Intento explicar, las guerras, los conflictos seguían existiendo en el mundo, pero al menos no habían alcanzado a muchos países o la escala era inferior. Si lo pensaba fríamente y tomaba lo que decía como cierto, la escala bélica de su tiempo mucho mayor y la destrucción masiva, las armas habían revolucionaron la forma de combatir. Pero esa información no la iba a mencionar, no cuando veía lo mucho que le estaba costando procesar el año en el que se encontraba, su propio conflicto interno.— Espera aquí, a que mi padre vuelva, él debe estar intentado encontrar un motivo o una solución. —Levantó la mano y la colocó derecha y la colocó sobre la de él, dándole un suave apretón.— No te vamos a dejar desamparado, aquí tienes un lugar, hay muchas cosas en esta era afuera que debes conocer antes de salir.
RsL1574861 · M
— ¿Paz? ¿Cómo pueden tener paz? —Demasiadas dudas y poco tiempo. Era demasiada información que absorber y comprender con lo más mínimo de su conocimiento, todo era totalmente nuevo y... Ella no ayudaba demasiado, porque simplemente no podía hacerlo. Nadie allí podía ayudarlo. Solo quedaba intentar pensar, recordar qué había sucedido exactamente antes de llegar ahí pero la cabeza le dolió, con fuerza, tanto así que tuvo que llevarse ambas manos para soportar la molestia.— No, no... Está bien, está bien. —Murmuró, entreabrió los ojos que permanecieron cerrados debido al dolor y la observó. No era su intención hacerla llorar en lo más mínimo.— Ya encontré la forma de volver. Por ahora... Debería buscar un lugar.
— Y-yo, yo no lo sé, no entiendo que está sucediendo. —Lo miró con lástima y tristeza, no le gustaba ver a las personas tan heridas, tan vulnerables, su madre más de una vez le había dicho que tenía un alma amable y a pesar de que no conocía de nada al chico se estaba preocupando por él. Tomó aire, con fuerza y pensó en que podía decirle, pero las palabras murieron en sus labios durante algunos minutos, tanto así que acabó por morderse el inferior con con fuerza y sus ojos se llenaron de lágrimas, como si sintiera su dolor.— Las guerras ya acabaron, es un periodo de relativa paz, y-yo lo siento. Solo soy una chica sin muchos conocimientos, no puedo ayudar.

Add a comment...
 
Send Comment