La primera y única vez que sintió verdadero temor fue cuando en una misión con Kaalia, la atraparon, nadie se entero de eso porque él no dejo que eso pasará, quien podría entrever la situación era Blue, pero como siempre estaba sumergido en sus asuntos, ahí fue cuando Ronan sintió que pudo haberlo perdido todo...
—¡NO! Tonta... Debiste quedarte donde te dije... ¡Debiste hacerme caso!...— de las primeras misiones de ella y tenían que ser una peor que la otra. Sin duda esta fue la mas peligrosa. La bestia -Ronan- se salió de control al ver que la usaron para querer lastimarlo, fuera por el hecho de ser ella o de atreverse si quiera a amenazarle de tal modo, que su rabia se desbordo. No escatimo en recibir cortes, incluso una bala en el costado del abdomen que dolía deliciosamente. ..ya que la misión no había sido esa, no se preparo para recibir daño pero no dudo en ser el chaleco antibalas de la pelinegra. —Tonta..— volvió a repetir en un susurro aferrándose a su fina cintura todavía infantil. El olor mezclado de ceniza y sangre en su cuerpo, nunca lo olvidaría.
