¡E-Eres un idiota! - Sin previo aviso, le propina una fuerte y ruidosa cachetada, para después elevarse de allí gracias a sus alas de murciélago, volando y apartándose de él, molesta, avergonzada y sonrojada. - Maldito equidna imbécil...¿Por qué me haces esto? Lo peor es que...Me gustó que me robaras esos besos. - Se decía a sí misma mientras volaba lejos, abrazándose y sonrojada por lo ocurrido.
Pensé que me detestabas o que harías todo lo posible para que me encarcelaran...¿Te comienzan a gustar las chicas malas, equidna? - Le preguntó mirándole con cierta seducción, sonriéndole levemente y con un tenue rubor en sus mejillas. - Robarme un beso lo confirma bastante...
¡...! -es zarandeado bruscamente de forma cómica por parte de la fémina, y medio mareado comentó lo siguiente- ¿En serio tengo que explicarte lo que acaba de ocurrir? Creí que tenías algo mas en la cabeza, a parte de pensar en joyas... ¡ me equivoqué por lo que parece !
... - Ese beso fue inesperado para la murciélago, la cual rozó con sus dedos sus labios, muy sonrojada y con la boca entreabierta. Sin embargo, se acercó a Knuckles y le tomó de la muñeca, con fuerza. - ¡¿Qué carajos fue eso, equidna?!
