Le recibe entre sus brazos con un amor infinito e incondicional que no hace por ocultar, ni siquiera frente a quienes rodeaban la mesa.

— Volviste con bien, ahora mi corazón podrá descansar un poco —reconoció con ternura tras separarse, pero sólo para poder apreciarlo mejor, removiendo los cabellos rebeldes y cafés que caían sobre la frente de Luke, despejándosela. Por último, dejó sus manos reposado sobre los hombros de su hijo—. Ya me dirás los pormenores más tarde, hijo mío.

Jamás se ha negado a las muestras cariñosas con su madre , el y su hermano la adoran y respetan con la fidelidad de un dragón .

— Madre me alegra verte —

Extiende ambos brazos en dirección del mayor de sus hijos.

— Saluda a tu madre.

Madre!