-Hundía un poco la cabeza y procuraba no quejarse, suspiraba en el oído del mismo y cerraba aquellos párpados purpúreos conquistando el agarre en dirección de la garganta del mismo.-

En ese caso tengamos fe.

A regañadientes la carga pero lo que él no quiere demostrar es el inmenso cariño que le tiene de hacer eso dejaría ver un punto débil y no cometerá ese error de nuevo.

─────Estas lastimada es lo que importa, ahora lo más importante es encontrar algo de vendajes y medicina no me detendre hasta encontrar eso.

Mal por ti, y creo que seguiré aumentando.

-Susurra risueña al oído de tal, para que termine sus quejas.-

Me quedaré así por siempre. -Y sigue diciendo para molestar.-

─────Creo que subiste de peso. ¿