RayonBuyersClub

Nombre:
Rayon.
Edad:
Treinta y cuatro años.
Sexo:
Masculino | Travesti.
Orientación Sexual:
Homosexual.
Ocupación:
Secretario | Vendedor de Zalcitabina y péptido T.
Enfermedades y/o adicciones:
Drogadicto | VIH.
Año en el que transcurre el rol:
1985.


Personalidad:
Es un hombre enérgico, terco y de buenas intenciones. Nunca está sin hacer nada porque le interesa de todo un poco y casi siempre se le ve intentando cosas nuevas ya que se aburre con facilidad. Trata de ser agradable con todos a cambio de que sean agradables con él, aunque en muchas ocasiones no caiga esa breva, pero prefiere ignorar y seguir con lo suyo.
Puede llegar a ser arrogante, orgulloso, coqueto, hiperactivo e impulsivo, así como a tomar decisiones de dudosa moralidad, pero sabe distinguir el bien del mal. En ocasiones tiene un carácter algo engreído y presuntuoso pero, en el fondo, sus intenciones son nobles.
Es muy independiente y fuerte pese a soportar la pesada losa de la drogadicción y su enfermedad. Sin embargo, continúa adelante, incansable, buscando una dirección, propósito y una vida aparte de la sombra de ambas cosas.
Abierto para entablar conversaciones y prefiere evitar discusiones que no tengan mucho sentido. Llega a ser amable, soñador, de ideas claras. Tiene miedo de que aquellos a los que quiere salgan heridos, y siempre actúa pensando en qué será lo mejor para el resto. Es reflexivo, le da muchas vueltas a las cosas antes de tomar una decisión, barajando todas las posibles opciones en busca de la mejor.
Tiene una cierta tendencia depresiva aunque la oculta tras una voluntad insufrible, si hay algo que odia es rendirse y por lo mismo muchas veces no se detiene a pensar las cosas, las hace y dice de golpe aún y si llega a herir a la otra persona.
Hace tiempo perdió las esperanzas de vivir un cuento de hadas, romántico, aunque sigue en secreto llenándose de libros de ese tipo y de otros, aunque nunca vaya a reconocer que también tiene un lado cursi dentro de toda esa fortaleza que quiere mostrar.


"La ley a veces parece carecer de sentido común. Y si una persona está terminalmente enferma debería poder tomar lo que piensa que le puede ayudar, pero la ley no dice eso".