-Aunque la pareja se había retirado, Eve no dejaría que esa chica le quite esa "preciosa" pistola.* - Dame mi pistola, - volvió a reintegrar siguiendo de ella y jalando su ropa sin ser violenta- Por favor, la necesito.

-fingió un violento escalofrío ante semejante mención y le miró con desaprobación-

ni yo.

No te imagino de madre, y yo menos de padre.

-Esperó a su novio a que la alcanzara y al escuchar su comentario, sonrió maliciosa mientras se agarra de su brazo para continuar juntos su camino-

Quizás. Incluso me haces reconsiderar devolvérsela

-y soltando una breve risa, se fueron alejando por la soleada y calurosa calle-

+Se marcho en conjunto con su pareja+

Sabes que si se mete un tiro me dara igual ¿No?

+Intridujo sus manos dentro de los bolsillos de su chaqueta estando al lado de la dama+

-Enarcó una ceja al escuchar el apelativo y sonrió divertida ante el malcriado comportamiento de la niña-

Alguien necesita un par de nalgadas, o quizás una bofetada.

-Aunque Elaia está en contra de la violencia contra un niño, no puede evitar sentir un poco de frustración por el berrinche de la niña-

quizás Rayne debería dártelas, por que él tiene la culpa.

-Y sin más, le da la espalda a la niña, ignorando la rabieta y asegurándose de llevar aún el arma y las municiones en su chaqueta antes de alejarse de aquel lugar-

-Al no obtener el arma, la niña comenzó a llorar con amargura- Mi pistola, maldita ladrona.

-Con la pequeña intentando quitarle el arma, Elaia ignora al resto de los presentes, incluso a Rayne que la elogia, a su modo, claro está. Se inclina frente a la pequeña y tomándole con dulzura del mentón, le mira fijamente con aquellos ojos grises, duros y penetrantes-

Escucha pequeña... Un arma, no es para una niña, pero si gustas, puedo enseñarte defensa personal... mm?

Comprendo Garbi, sabes que no tengo tacto en ese aspecto... pero al menos tu si lo conservas

- Es mía, es mía, Rayne me la regaló. - Decía alzando sus manitas para alcanzar el arma, aunque su pequeña estatura no se lo permite.- Rayne, dile que me regrese mi pistola.