« Back to Album · Next »
 
This page is a permanent link to the comment below. See all comments »
R1581860 · M
—Soy una espina en el costado del Vaticano. Demasiado bueno en lo que hago como para que me manden a freír espárragos; demasiado bueno también en lo que no debería hacer, como para que me tengan vigilado y no me permitan acercarme a los conventos.

Era una manera sencilla y elocuente de decirlo, a menos a su parecer. Y, si bien ya daba muestras de su desenfado habitual, aún se le veía cansado; si bien bastante atento de la joven, comprendiendo al punto que ella había empleado demasiada energía en salvarlo.

—No les gusta que no juego de acuerdo a sus reglas. Y no, no voy a hablarte de la Biblia; me dormía durante el catecismo. —Bromeó, sintiéndose lo suficientemente repuesto como para incorporarse y recargar su torso en el filo de la bañera, cerca de Aleks. —Pero sí tengo las mías, y una de ellas es compensar a quien me salva. Así que puedes pedirme lo que quieras.
 
Send Comment

Add a comment...
 
Send Comment