ᅳ Oh... eres tu. ᅳ No lo habia notado ahí parado hasta que puso la llave en el cerrojo. ¿Cuánto tiempo llevaba ahí? No lograba recordar si su padre le habia avisado o no cuando llegaba. Pero ya no importaba, estaba ahí despues de todo. Joder, y ni siquiera habia ordenado el departamento. ᅳ Estás más alto, ¿llevas esperando mucho tiempo? ᅳ Preguntó mientras terminaba de abrir la puerta. Cargaba un par de cosas para la cena, tendria que improvisar con lo que tenia adentro para hacerla más contundente. Mantuvo la puerta abierta para que él pudiera entrar.
La única respuesta que dio al cuestionamiento de sus gustos gourmet fue sacarle la lengua a su hermano, tal y como si aún fueran niños. Se mantuvo observandolo, su pequeño hermano menor, su pobre hermano menor. ¿Cuando había sido la última vez que lo había visto? No podía recordarlo. Sus ojos se pusieron en blanco por un par de segundos por el comentario sobre su cerveza. - Si es temprano, pero ya sali del trabajo y no tengo que hacer. Vamos, ¿no merezco una cerveza? - Hizo un leve puchero antes de volver a beber. Suspiró luego del trago ante la respuesta sobre su padre. No le sorprendía, lamentablemente, siempre había sido ausente, y que hayan estado viviendo juntos no significaba lo contrario. - Siempre está ocupado, así que igual puede ser buena señal, al menos esta vivo.- Bromeó, sonriendo levemente. No pudo evitar extender una de sus manos para tomar la de su hermano. - ¿Tu has estado bien? Se que no hablábamos mucho… pero eso no quiere decir que no me preocupe por ti.- Confesó.
de ese porte tan catastrófico, y que mas decir sobre su padre. Todo era borroso, como una tormenta de invierno que le hace temblar al punto de mantenerse al borde de responder. ᅳ Esta bien, pero no le veo desde hace casi tanto como tu. Esta ocupado para eso. ᅳ
ᅳ ¿De verdad? ᅳ Era capaz de aquello, suspiro con desdén al oír la mortal combinación de panceta y piña. Dante se sentó en la silla del comedor, alzo ambas cejas con tranquilidad. Suspirando mientras intentaría objetar sobre aquella particularidad elección. ᅳ ¿Estas segura de beber a esta hora? Es bastante temprano, te vas a empalagar con esa pizza tan fea. ᅳ Su padre también pedía lo mismo, lo que le hacía tener un breve recuerdo de el ¿Tragicómica? Como era su vida, si, una tragedia que parecía ser recordada incansablemente, por mas que intentara escapar siempre estaría esa sensación, no podría escapar de su pasado emulado en una hórrida pizza...
lata.- A todo esto, ¿cómo ha estado él? - Quiso asumir que por haber estado viviendo con él quizás lo veía más seguido, aunque tampoco podía evitar ponerlo en duda.
Le fue inevitable sonreír al ver como se colocaba la pantuflas, pensar que las había comprado para el ultimo idiota con el que había salido, obviamente Dante era un sueño mucho más signo para esas bellezas. No dijo más al escuchar su petición, tomó el celular y marcó el número del Delivery. - Hola, quiero pedir dos pizzas. Si si, esa promoción. Una fugazzeta y la otra… - Se paró solo un segundo para mirar a Dante, la maldad marcada en su semblante. - Ricotta, bacon y piña.- Si, le estaba declarando la guerra. - Ajá, palos de ajo y una Coca-Cola.- Es resto fue decir su dirección,la forma de pago y listo. Colgó el celular, dio un largo trago a su cerveza y luego se estiró. - De seguro se lo podremos cargar a papá como venganza por no haberme avisado de que llegabas hoy y por haberte hecho esperar afuera. - Tomó asiento en una de las sillas cerca de la mesa americana, apoyó el codo de su brazo derecho sobre esta y sobre la mano apoyó su cabeza, mientras con la otra jugaba levemente con la
ᅳ Me gustan mucho, nunca había tenido algunas. ᅳ Era sincero, claro que si. Pues las colocaría en sus ahora descalzos pies, sintiéndose un poco ridículo mientras suspiraba. Pero si eran cómodas, difícilmente se las sacaría en algún momento de su estancia en la casa (tampoco es que tuviera muchos motivos por los cuales irse). Dante carraspeo al pedirle los gustos de pizza. ᅳ De Fugazetta esta más que bien, pero me gusta cualquiera menos de ananá o de piña. Eso no es pizza.ᅳ Dijo muy seriamente, como si fuese preparado para una discusión de geopolítica sobre la intromisión ofensiva de comidas ajenas en su sagrada pizza. Dante se sentía algo inútil, ya que Olivia tenía su propio estilo de vida y el llego a arruinarlo...
ir al supermercado en vez de la tienda de conveniencia. - Dijo para sí misma, es que recién caía en cuenta que no se había preparado en lo absoluto para recibir a Dante, y no había nadie a quien culpar de eso, ya que después de todo si le habían avisado con tiempo que el llegaria a quedarse.
Uuuh, ¿las odias, no? - Cualquiera que hubiera visto la mueca de su hermano llegaría a esa conclusión. Pero no le molestaba, de hecho sonreía entretenida. - Nada que agradecer, procura usarlas cuando estés en casa, si lo haces prometo no odiar a tu gato.- Bromeó, dejando las pantuflas sobre la cabeza de su hermano para que las tomara. Ella ya llevaba las suyas, unas con forma de pingüino. Volvió a la cocina y escogió el flyer que tenia el numero del delivery de pizza. - ¿Qué ingredientes quieres? Pediré dos así que una puede ser con lo que quieras,si tenemos suerte sobrara hasta mañana.. - Ella por mientras revisaba el menú y miraba de reojo el contenido del refrigerador, de donde no tardó en sacar una cerveza. - ¿Tienes sed o algo? ¿Bebes? - Preguntó mientras mantenía la puerta del refrigerador abierto.- Tengo agua, cerveza, y creo que agua mineral. - Lo miraba desde atrás de la puerta, y luego al pobre contenido de electrodoméstico. - Probablemente deba comprar más cosas...
ᅳ Gracias, no tenía una de esas. Se ven cómodas para estudiar. ᅳ Se vería ridículo suponía con ellas, pero al menos su hermana se había preocupado por el. Carraspeo en una breve (e innecesaria reverencia hacia su propia hermana). ᅳ Gracias, Oli. ᅳ
