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Apúrate no te voy a estar esperando...-Carraspeo, tenía un trabajo, uno de tantos solo que desde un tiempo para acá no iba sola Alessandro se había ofrecido y pese a que todavía no confía en él, tampoco era desagradable pasar el tiempo en su compañía y el tipo es eficiente. Mientras no le estorbe sirve, es lo que pensaba Nicoletta cómo si se justificara a si misma, ya que al haberle aceptado se sentía un poco blanda por la situación. Respiro hondo mirando hacia varios puntos y contando, no sabe la razón pero aquello le relaja igual puede que sea uno de esos trastornos.
 
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Guardo el encendedor en el bolsillo de la chamarra y luego saco una paleta, tirando la basura al suelo para después meterse el dulce en la boca. Al momento de cruzar miradas arrugo su gesto, para ser tan joven hace muchas expresiones que muchos dirán que eso la hará vieja en poco tiempo, no saben los buenos genes que Donna le heredo. Se tomó el atrevimiento de acomodarle las solapas del cuello cuando esté cambio ligeramente su expresión, a veces no se daba cuenta de ciertas cosas por descuidada o porque prefería no indagar. —No tienes que vestir esto siempre... — le soltó y desvío la mirada adelantando sus pasos. —No lo había pensado, me cirno a lo que me piden así que podría considerarse. Vamos.. en el lugar decidiremos, deja solo paso por un café. — giro un poco la cara para verle aunque seguía caminando hacia adelante.
La miró de soslayo, esa forma suya de apreciar a la adversa. Su gusto imposible, que aunque confesó más de una vez sus verdaderos sentimientos había sido rechazado de maneras humillantes. Le gustaba eso, su propio reto personal.
Cuando la foto se le ofreció no duda en tomarla; inmediato sus ojos se afilan, y recorre cada detalle de la misma para no perder ni un solo rasgo característico de ese rostro latinoamericano.
Ya tenía una misión. Podía despertar.
Por muy contraria a su personalidad habitual, cuando había un trabajo entre manos el Alessandro de costumbre cambiaba. Él mismo se acomodó la corbata, el saco y camisa hasta verse lo más presentable posible, por desgracia algunas arrugas por falta de plancha eran difíciles, o más bien imposibles de disimular.

—¿Ambos deben serlo? —Preguntó sin verla, seguía ceñido en la foto—, sí tiene a la niña podemos negociar su aparición con un secuestro, hay una bodega en la costa casi intransitada. Podemos citarlo allí.
Rodo los ojos, se había terminado por agachar a esperarle. Se repetía así misma el porque lo había aceptado y no encontraba respuesta, seguramente era la toxicidad que despedían ambos o más bien sus daddy issues sin resolver. Todo juega en contra y ahí estaba esperando al bastardo. —Te avise para que estuvieras listo, ¿Porque putas no puedes hacerlo? Solo te pedí una cosa. — chasqueo la lengua mientras juega con un encendedor, su nueva adquisición parecía el planeta Saturno por su ostentosa forma. Reincorporo su cuerpo hasta alcanzar su altura y le dio un papel con la foto y nombre del objetivo. Un capo menor de los mexicanos, estaba siendo una molestia para uno de sus contactos. —El "Chicho Martínez. " Alfredo Jose Martínez Jiménez, cree que se puede mandar solo. Tiene una quinceañera ,nada como una fiesta entrar en ambiente. Es captura vivo. — se adelantó unos pasos sacando las llaves de su motocicleta.
—Ya voy, ya voy....~ Con tanta prisa no pude tomarme mi café.

Dijo soñoliento. Había tratado de apurarse tan rápido como pudo cuando recibió el mensaje para el trabajo, pero como siempre era su maldición llegó tarde.
Su ropa arrugada, incluso la corbata a medio hacer. Lucía un completo desastre.

—Siento la tardanza, pero ví unas ancianitas queriendo cruzar la calle y tuve que ayudarles.

Se excusó una vez quedó a lado de la rubia.
Alessandro bostezó. No iba a preguntar qué debían hacer. Sólo iría y cumpliría con su trabajo; así actuaba un perro de caza. Las luces neón de la ciudad acompañadas del desolado ambiente eran tan relajantes que podría dormir en media calle sin a que después apareciera un auto de la nada para atropellarlo.

—¿Cómo se llama? —Preguntó por el siguiente objetivo.




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