~Si, pronto acabarse con ustedes y haré versiones mejoradas como hice con mi pequeña. Haré del reino Barrow el más fuerte de todos los reinos.

—En eso tienes razón Agni, seran los fuertes quienes al final salven a este mundo de ti.

Una sonrisa segura y una mirada firme se mostraban en el rostro de Ainu

~No lo hacen ahora pero pronto lo harán, cuando vean su luz consumida por la oscuridad entenderán que su gobernante fui yo, después de todo los fuerte somos quienes dominamos el mundo.

-Le permitió acercarse pero sus palabras no lograron hacer ningun estrago en Ainu. Le miró de reojo y una pequeña y cordial sonrisa se dibujó en sus labios-

—El exceso de seguridad puede ser peligroso Agni, solo te recuerdo que no fui yo quien tuvo que tomar el reino de alguien más, tu poder solo radica en el miedo y el engaño y aquí, nadie te teme.

~Hermanita no te subestimo, se que eres fuerte no hay duda de eso.

°Sonríe de forma maliciosa y se acerca a ella solo para susurrar a su oído lo siguiente°

~Pero sigues siendo más débil que yo. Pronto tu reino será parte del mi reino de cenizas.

—Uno de tus mayores errores Agni, es creer que sigo siendo la misma de antes, no cometas el error de subestimarme.

~ ¿Y que si no lo hago? Le pedirás a nuestro padre que te defienda, como solías hacerlo en la infancia, solo te la pasabas siendo cargada por él ¿Recuerdas?

—Deberias cerrar la boca

~Deberías guardar esa espada y dejar que los verdaderos guerreros la usen.