SUPERAME máximo

¡Daddy volviste! -Menciona el pequeño desde la lejanía y sin mucho que hacer, emocionado corre hacia el albino. Prontamente sus brazos rodean el cuerpo del mayor mientras acurruca su rostro en su pecho, aunque no puede evitar hacer una mueca de disgusto al ver la mano cortada.- ¿Qué es eso Daddy?

Entonces eso me hace más feliz. Otro hombre derramando sangre terrana merece mi aprecio. —Sonrie de lado. Se empuja de la pared para caminar hacia el.— Bastante bien, ligeramente aburrido.

Es bueno que te agrade, porque es un lado que frecuentemente sale a relucir. ¿Qué tal te ha ido, Rayeir?

El día que te conocí en el casino jamás esperé este lado tuyo. Me agrada. —Cruzado de brazos, recargado en el muro cercano con la cadera ligeramente de lado observa al Terrano frente suyo. Algo sobre él era misticamente cautivante, tan atrapante que no se atrevía a mirar a otro lado.—