Pues tengo algo de tiempo ahora, así que puedes decirme

-No deseaba preguntar más sabia que Niko la estaba pasando mal al igual que su hermano mayor- Si muchas cosas no se ni como comenzar a contarte

Está bien -Respondio sin mucho ánimo, para luego mirarle y tratar de sonreír- Parece que muchas cosas pasaron mientras no estaba.

¿Como esta Kiria?-Pregunto con cuidado podía intuir que algo le había pasado al mayor aún así no estaba al tanto de todo, asintió suavemente- Gracias

-Le guío al interior de la casa, había comprado, algunas cosas para cenar, dado que su madre no estaba - Vamos dentro - Le guío al interior de la casa- Ponte cómoda, estás en tu casa.

Sabes que si.-Asintio ante la idea separándose del abrazo poco a poco sin querer soltarlo pero debia hacerlo para poder entrar en la casa-

También te extrañé - Sonrió con suavidad para ella y le bajo- Por poco no encuentras a nadie, vamos ¿Te quedas a cenar conmigo?

Dioses te extrañe horrible.. Y hola-Tambien le estrechó fuerte entre sus brazos sin evitar sonreír de oreja a oreja-

-Le recibió entre sus brazos y le levantó un poco al ser más pequeña ella - Hola, Daci -Le estrecho con un poco de fuerza -

-Se le hizo extraño que la casa estuviese sola pero aún más el olor a sangre que había podido percibir cuando escucho aquella voz tan conocida y que tanto había extrañado- ¿Niko? ¡Niko!-No tardo en correr a la dirección del muchacho y abrazarle-