Le fascinaba que ella entendiera perfectamente lo que él deseaba, de tal manera que ante los sensuales frotes que realiza su amada mujer, fue inevitable que el cuerpo masculino reaccionara de inmediato, procediendo a elevar las manos hasta los pechos de su amada, manoseándolos por encima de la delgada tela del delantal. — Me leíste la mente, puesto que yo deseo que seas mi postre e ir directo a ello. —
Quiero mantener a mi amado novio feliz y contento. -Sintió el cuerpo de aquel hombre alto rodearle y se estremeció un poco dado a la cercanía y por el susurro cercano a su oído, dejándose acoplar completamente al joven, incluso frotando de manera suave su traserito en contra de el.- Te cocinaré algo y yo seré el postre ¿O quieres ir directo al postre?~
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Pues Prácticamente el delantal no le cubre absolutamente nada, de hecho, no tardó en acercarse hacia ella, abrazándola por la espalda y aproximando los labios hacia el oído de aquella vampiresa susurró. — Eres muy complaciente, tu sola presencia aquí es el mejor presente que me puedes brindar. —
Es un lindo delantal, ya que decidí cocinarte algo rico~ -Sonrío suavemente acercándose a el, mientras no quitaba sus ojos azules de el, portando esa prenda que cubría únicamente los lugares necesarios, resaltando sus grandes pechos, su pequeña cintura y sus caderas anchas.-
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— Parece que te quedó excelente ese "traje" — No tenía ni que pedir permiso al momento de ingresar a las habitaciones.
