"Princesa del sol y la luna, es hora de que despiertes"
Hay una vieja leyenda que cuenta el amor prohibido entre un ángel y el príncipe de los demonios. Ambos se amaban con total sinceridad, y soñaban con compartir su eternidad juntos.
Pero en sus respectivos reinos era mal visto una relación tan pecaminosa como la que ellos tenían, no podían arriesgarse a que alguien se enterara de su amor. Es por eso que planearon escapar al mundo de los humanos y disfrutar de su amor sin miedo a los demás, pero antes de que pudieran hacerlo, alguien denunció la locura que ambos seres iban a cometer.
El rey del infierno en ese entonces, tomo posesión de el alma del príncipe y lo controlo a su antojo para que le rompiera el corazón al ángel, que al ver el desprecio que su amado le demostraba, regreso al cielo con el corazón hecho pedazos. Dios, su padre, al verla llegar no hizo más que despreciarla y sentenciar que ella era una pecadora, que no merecía estar en el reino de dios. Y así como si fuera un simple objeto, le quito sus hermosas alas blancas y la desterró del cielo como una traidora.
La joven, ahora un ángel caído, bago por el mundo sola y con tristeza, pues en sus pensamientos toda la culpa de lo que le estaba ocurriendo era de su gran amor al príncipe de los demonios. Pero antes de que se dejara caer por las penumbras de la vida, se enteró de que en su vientre se encontraba el fruto del amor entre ella y el demonio. Lucho cuanto pudo en todo su embarazo, pero al final murió en el parto dejando huérfana a la hija que había dado a luz en esa noche de tormenta.
Cuando el príncipe de los demonios se enteró de lo que el control de su padre en él, lo mato con sus propias manos, pero al no encontrar paz en eso, termino por quemar su alma en el lago de la miseria donde termino muriendo para toda la eternidad. El reino de los muertos quedo sin algún heredero digno para gobernar, pues aun que había un segundo hijo del rey, no tenía las capacidades necesarias para gobernar.
"Cuando la niña cumpla la edad de 18 años, será adoctrinada y bautizada en la magia oscura, para que así se convierta en una heredera digna del inframundo y en un futuro tal vez, la reina de los demonios."
Nacida como una huérfana, Marceline Serenity fue llevada a un orfanato desde su nacimiento.
Tratada como bicho raro por ver cosas donde no las había, era apartada de los demás niños ocasionando que su niñez fuera realmente triste. A esta misma edad ella conoció a sus guardianes, un ángel llamado Benjamín y un demonio llamado Alexander, quienes estaban encargados de velar por su bienestar desde su primer aliento.
A la edad de 15 años, ella llegó a la conclusión de que no era como los demás adolescentes, pues podía ver y hablar con fantasmas, siempre tuvo una fascinación descontrolada por las cosas oscuras y tenebrosas, sin contar que era la única que podía ver a sus guardianes, quienes a pesar de la insistencia de saber la verdad de su existencia, nunca le dijeron nada de su origen a Marceline.
Cuando cumplió los 17 años, se le regaló su primer libro de sobre las artes oscuras, el cual tardo en leer exactamente un año, acabándolo el día de su cumpleaños número 18. Por petición de sus guardianes, y más por parte del ángel Benjamín, se le pidió que realizara el ritual de invocación que venía en la última hoja, pues ahí tendría las respuestas que tanto había pedido. Llevándose la sorpresa que al dominio que había invocado, era nada más y nada menos quien vendría siendo su tío, quien le contó toda la historia de sus padres y el propósito de su existencia.
Desde ese momento Marceline sea dedicado a estudiar y aprender todo lo referente al reino de los muertos, bajo la tutoría de su tío, la compañía de sus guardianes y todo el entusiasmo de ser una digna hija para su padre y madre.
