- El Phantom en principio resistió los primeros ataques pero la luz y el fuego lo debilitaron. Al recibir el tercer ataque, el pico salió volando por los aires, cayendo a una distancia algo lejana de sus manos..

La tierra crujió una vez más ante ese choque y los gritos del phantom resonaban en todo el bosque como un poderoso eco; su cuerpo seguía derritiéndose pero esta vez a mayor velocidad, dejando una mancha negra en el suelo, casi convirtiéndose en una especie de charco de tinta que poco a poco fue afectando el suelo del bosque.

Aún así siguió su ataque, esta vez golpeando el suelo que ahora parecía un pantano nauseabundo, agrietando el poco suelo firme y atrayendo a los intrusos hacía esa trampa de tinta con el único fin de enterrarlos vivos.

En la cabeza del Phantom una joya negra resplandecía y con cada golpe la joya brillaba con mayor intensidad. -

Lilia demuestra sus reflejos al esquivar exitosamente todos los ataques de aquel Phantom, pero le cuesta mantenerse estable con la forma en la que se movia el suelo.

- Demonios.

Maldice el hada, midiendo sus posibilidades antes de ir a por aquel pico que tenia su enemigo en mano, moviendose rapidamente para poder separarlo finalmente de este y dejar a su enemigo desarmado de una vez por todas.

- Retrocedió con el tirón que le dio Idia, pero era difícil mantener el equilibrio con los constantes golpes que daba hacia el suelo. Al igual que Idia, y siguiendo las instrucciones de Lilia, lanzo ataques mágicos del elemento luz directo a la cabeza, la serpiente que formaba su báculo emitía la magia por medio de sus fauces dando certeros golpes que se combinaban con la magia de fuego de Idia. -

¡Esa cosa es un monstruo! ¡Como los que solo aparecen en los cuentos!

- Trataba de mantener una distancia segura pues su mayor preocupación era que ese pico cayera sobre alguno de ellos y terminara por lastimarlos seriamente. -

—Demonios, demonios... Un golpe de esos y será nuestro fin— Instintivamente tiró de las ropas de Lilia y Kalim para hacerlos retroceder un poco, esa cosa bien podría matarlos si los alcanzaba con su arma.

—No dejemos que se nos acerque...— Dijo finalmente y orquestó un segundo ataque hacia el monstruo haciendo un ademán con su mano, su cráneo volador lanzó una bola de fuego que tomó dirección a su cabeza, a ese punto ya no tenía tiempo de tener miedo, solo quedaba atacar para sobrevivir.

- Ante la negativa de abandonar el bosque, el Phantom empezó su ataque, arremetiendo contra los 3 intrusos con golpes certeros de su pico y una velocidad sobrehumana. Con cada golpe que daba, la tierra retumbaba y la energía oscura del lugar se hacía más densa, cubriendo el bosque con una niebla espesa. -

-Tsk!

Lilia chasquea la lengua en cuanto ve a aquel Phantom aparecer frente a ellos, mordiendose el labio inferior y dando varios pasos hacia atras para tomar distancia de la bestia

- Mantenganse detras de mi!

Brama el ex-soldado, finalmente pudiendo ver a su enemigo, o al menos al primero de ellos. Los chillidos del Phantom junto con el horrible olor que estaba emanando del bosque comenzaban a aturdir sus sentidos, llevandose su mano libre a la nariz para cubrirse, pero sabiendo que tenia que atacar

- A la cabeza!

Indica antes de soltar el primer ataque mágico directamente donde estaba la cabeza de aquel ser que no dejaba de brotar tinta negra, sabiendo que con el tamaño del enemigo, la distancia iba a ser su mejor amiga.

- Se petrifico en el lugar que estaba, nunca imagino ver una criatura de ese tipo. Trato de cubrir su nariz ante el aroma que empezaba a aparecer en el bosque, un aroma parecido a tierra muerta y pantanosa, realmente desagradable. -

Lilia! ¿Como vamos a pelear contra esa cosa? es... es... ¡GIGANTESCA!

- Preparó su báculo, listo para atacar con toda su magia pero prefería esperar y seguir las órdenes que diera Lilia, ya que de los 3, Lilia era quien tenía mayor experiencia en combate. -

Se parece un poco al Phantom que apareció cuando Jamil tuvo su overblot, y si es igual de fuerte ¡tendremos muchos problemas!

- Observo a Idia y luego a Lilia. Como desearía que Jamil o los demás estuvieran aquí para poder pelear contra ese ser. Su voz estridente era ensordecedora. -

¡¿Por qué Malleus tenía que venir aquí?!

- Lamentó en voz alta mientras trataba de controlar el miedo que empezaba a brotar en su corazón. -

—¡Esa cosa es horrible!— Exclamó al ver al phantom que se les había aparecido, un escalofrío le recorrió desde la espalda baja hasta la nuca y le erizó mucho la piel, aquella bestia oscura emanaba una energía tan oscura que incluso le daban ganas de vomitar, todo en su ser le decía que tenía que huir, pero no sería capaz de dejar solos a Kalim y Lilia, aún cuando se moría de miedo, tendría que pelear junto con ellos o todos terminarían muertos.

—E-está... está custodiando ese camino, detrás de él debe estar el sitio que buscamos... vamos a tener que encarganos de ese ser—

Aquello último no lo dijo con energía, sino más bien con una lastímera resignación, era obvio que no quería pelear y mucho menos tenía confianza en hacerlo, pero su magic pen flotante, su craneo robótico que era lo único que no había dejado de funcionar desde que entraron en ese terrible bosque estaba más que listo para atacar o defender según fuera necesario.

- El primer encuentro se daría... El bosque crepito y una especie de Phantom arremetería contra los intrusos. Con un cuerpo que parecía derretirse con cada paso que daba y un pico gigante, golpearía el suelo del bosque una y otra vez provocando breves temblores. Un rugido intenso, similar a un rayo golpeando la tierra sería el sonido de su voz, el cual exigía que abandonaran el bosque de manera inmediata.


Un ser completamente hecho de oscuridad que llenaba con su presencia un aura negativa y nauseabunda. Detrás del Phantom se abriría un sendero que conduciría al corazón del bosque. -

Lilia se alarma en cuanto siente aquel temblor en el bosque, mordiendose el labio inferior y sosteniendo ahora la mano de ambos entre las suyas, frunciendo el ceño para nada feliz con lo que estaba sucediendo

- Mantenganse cerca de mi... sigamos avanzando, yo me encargaré de protegerlos si algo nos ataca

Suelta las manos de ambos para tenerlas libres y poder estar listo para pelear, aferrandose mas a su magic pen y maldiciendo el hecho de no tener su adorada arma con el

- Rayos... mantenganse alertas, si?