—No te voy a dejar en paz, ¿Cuando entenderas eso— Soltó un suspiro pesado, comenzaba a desesperase. —He estado pensando en no dejarte ir, sera mejor para mi permanezcas confinada a mi lado—

—La falta de interés que tengas en mi, eso a mi no me interesa. Odiame, repudiame, rechazame, eso no me hará retroceder, podemos hacer esto a la fuerza y solo se volverá mucho más satisfactorio para mi—

Busca alguien más con quién divertirte Caín, no tengo interés en formar parte de tus juegos Sus manos seguían tocando su cuello para luego acomodar su gargantilla ¿Que te hace pensar que voy a dejar que me beses?

—Eres una mujer bastante fuerte, eso a veces es molesto cuando deseo divertirme, pero me conformo con esa marca en tu cuello, por ahora. Después, quizás podría marcar otra parte de ti, pero esta vez con mis besos—

En cuanto libero su cuello llevo su propia mano a este, como si debiera recuperar el aliento, por desgracia la fuerza del mayor había hecho estragos y logrando su cometido, dejo un marca en la nivea piel de la rubia, quien chasqueo la lengua molesta Idiota

Se escuchó la traquea tronar y aunque podía aplastar ese cuello con facilidad, luego de minutos de ver que esa indiferente expresión no cambiaría termino soltándola, mostrando una leve decepción en su rostro. —Esto no es divertido —

Cerro los ojos brevemente, solo para luego mantenerle la mirada, levanto levemente la cabeza de modo que sus manos no le causarán tanto daño

Aquel inexpresivo rostro femenil lo provocó, lo tomó cómo un reto, cerrando mas su mano alrededor de ese delgado y a simple vista frágil cuello. Su mirada en ese momento mostro un brillo intenso, de cierta forma encontró placentero aquel acto.