-Estaba un poco cansada pero ya a encontrar una amiga y compañera, siente un peso menos sobre sus hombros pues al menos no estara sola-.

Maravilloso...

-Comentó al mirar de cerca la moto que Claire le mostraba. -

Claro que te sigo, según investigue hay una tienda de armas a un kilómetro.

No me digas eso, yo también estoy corta, tendremos que buscar.

—La vida en ese escenario no era sencilla, todo se tenía que conseguir a base de sigilo o abrirse paso entre las hordas de zombies, pero al menos ahora estaba con su compañera, colocó la mano en su hombro y luego señaló su propia motocicleta.—

Me hice de esta belleza unos pueblos atrás, tiene combustible ¿Me sigues?

-Mostró una agradable sonrisa pasando a tomar la mano de su amiga y compañera-.

Me encuentro bien, mejor ahora que te encuentro... Casi me quedo sin balas.

-Comentó cargando uno de los pocos cartuchos que lleva con ella. -

—Camina hacia ella y estrecha su mano cordialmente, la joven Claire parecía ciertamente fatigada, sus ropas algo gastadas y rasgadas, de la munición que llevaba ni hablar, era escasa.—

¿Cómo te encuentras? Me da tanto gusto verte.

—Sonrío cálida a la que hasta ahora es su amiga y aliada en causa.—

Claire, es un gusto verte otra vez.

Alice, cuánto tiempo.